CAPÍTULO 44
ELISA SE COMPORTA DE UN MODO EXTRAÑO
N
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atalia y Bibiana no
dormían, tenían la oreja muy atenta a lo que pasaba fuera de su habitación y
oyeron claramente cuando Blas salió del cuarto de Nicolás. Poco después, las
dos niñas fueron a ver al muchacho. Este les explicó lo sucedido.
—Blas es un buen hombre —concluyó Bibiana—, ha creído a Estela y va
a enterrar su carta. Yo creo que deberíamos contarle la verdad, pienso que nos
ayudaría.
—¡De ninguna manera! —exclamó Nicolás— ¡Se pondría hecho una
fiera y nos enterraría a todos junto a Salvador Márquez!
Bibiana no creía que el
joven hiciera algo semejante pero guardó silencio, resignada. Convencer a
Nicolás de que lo más conveniente era hablar con su tutor era una labor imposible.
—¿Y qué vamos a hacer ahora? —indagó Natalia, nerviosa.
—Ya se me ocurrirá algo —respondió su primo—, tengo que pensar.
ῳῳῳ
El señor Teodoro después de vestirse, coger la
llave del portón del cementerio, la linterna y la pala que había utilizado Nicolás, se
fue con Estela en el todoterreno.
ῳῳῳ
Elisa Rey se despertó de sopetón, presa de una tremenda
sensación de soledad. Anheló estar al lado de Blas y sentir su abrazo. Se
levantó y fue hasta su habitación, encontrando la cama vacía.
Se acostó, embriagándose del aroma del hombre impregnado en las sábanas.
“¿Dónde estás, Blas?”, se preguntó. “Cuánto
deseo tenerte junto a mí, casarme contigo, tener un hijo tuyo!”
“¿Me lo pedirás algún día?”.
La joven pensó en Nicolás y sospechó que Blas debía
estar con él. Siempre Nicolás
tenía que estar por el medio. Aquel
muchacho era el centro de la vida de Blas; su norte, sur, este y oeste.
Una fea sombra asomó a su rostro, tornando sus suaves facciones en crispadas y oscureciendo sus ojos almendrados.
Decidida, se encaminó al cuarto del niño para comprobar si sus sospechas eran ciertas, y reclamar la atención del señor Teodoro. Su sorpresa fue grande cuando, en lugar de encontrar a Blas, halló a Natalia y a Bibiana.
Una fea sombra asomó a su rostro, tornando sus suaves facciones en crispadas y oscureciendo sus ojos almendrados.
Decidida, se encaminó al cuarto del niño para comprobar si sus sospechas eran ciertas, y reclamar la atención del señor Teodoro. Su sorpresa fue grande cuando, en lugar de encontrar a Blas, halló a Natalia y a Bibiana.
—¿Qué hacéis vosotras
aquí? —preguntó,
enfadada — Son casi las cuatro de
la madrugada. ¡Id a vuestra habitación enseguida!
—Solo estábamos hablando —declaró Nicolás, extrañado
de la rudeza de Elisa—. No estamos haciendo nada malo.
La mujer lo miró con acritud.
—¿Te parecen estas unas
horas normales de hablar? —interrogó, ásperamente— Ven conmigo, Nico.
—¿A dónde? —inquirió el crío,
desconfiado. Notaba a Elisa muy rara y
le desagradaba la rabia que veía en sus ojos.
¿Qué mosca le había picado? ¿Por qué razón lo miraba así?
—Te he dicho que vengas conmigo —le ordenó su tía secamente—. Obedéceme o te aseguro que tendrás problemas con Blas. ¡Y vosotras, acostaros de una vez! —ordenó a las niñas en el mismo tono desabrido.
Natalia y Bibiana salieron de la estancia y Nicolás siguió a Elisa, escaleras abajo.
—¿Qué rayos le pasa a tu tía? —preguntó Bibiana a Natalia, perpleja.
—No tengo ni idea —respondió su amiga, apesadumbrada—. Nunca la había visto así. Me ha dado un poco de miedo.
Las dos muchachas se acostaron, entristecidas, por el comportamiento de Elisa. Patricia continuaba durmiendo sin enterarse absolutamente de nada.
Elisa condujo a Nicolás al dormitorio de Blas y obligó al niño, bajo amenazas, a entrar en su cuarto. Seguidamente, cerró la puerta con llave.
—¡A ver si ahí encerrado no causas problemas! —le gritó desde fuera, marchándose de la habitación de Blas.
—¡Eres una bruja! —chilló Nicolás, fuera de sí— ¡Digna hermana de mi padre! ¡Te pareces a él! ¡Tienes dos caras!
El muchacho golpeó la puerta, dándole manotazos y fuertes patadas.
—¡Sácame de aquí! —gritó con desesperación— ¡No quiero estar encerrado! ¡No soy un delincuente!
¿Qué mosca le había picado? ¿Por qué razón lo miraba así?
—Te he dicho que vengas conmigo —le ordenó su tía secamente—. Obedéceme o te aseguro que tendrás problemas con Blas. ¡Y vosotras, acostaros de una vez! —ordenó a las niñas en el mismo tono desabrido.
Natalia y Bibiana salieron de la estancia y Nicolás siguió a Elisa, escaleras abajo.
—¿Qué rayos le pasa a tu tía? —preguntó Bibiana a Natalia, perpleja.
—No tengo ni idea —respondió su amiga, apesadumbrada—. Nunca la había visto así. Me ha dado un poco de miedo.
Las dos muchachas se acostaron, entristecidas, por el comportamiento de Elisa. Patricia continuaba durmiendo sin enterarse absolutamente de nada.
Elisa condujo a Nicolás al dormitorio de Blas y obligó al niño, bajo amenazas, a entrar en su cuarto. Seguidamente, cerró la puerta con llave.
—¡A ver si ahí encerrado no causas problemas! —le gritó desde fuera, marchándose de la habitación de Blas.
—¡Eres una bruja! —chilló Nicolás, fuera de sí— ¡Digna hermana de mi padre! ¡Te pareces a él! ¡Tienes dos caras!
El muchacho golpeó la puerta, dándole manotazos y fuertes patadas.
—¡Sácame de aquí! —gritó con desesperación— ¡No quiero estar encerrado! ¡No soy un delincuente!
ῳῳῳ
El señor Teodoro sepultó la carta de
Estela sobre el ataúd de Jeremías. La señora Miranda sintió
grandes remordimientos.
—No sé cómo he podido enviar a Nico aquí —declaró con amargura—. Este lugar es terrible
por la noche. Ha tenido que pasar un miedo espantoso. Y Tobías lo ha debido
asustar muchísimo. ¡Pobre criatura!
—No se torture, Estela —le aconsejó Blas,
comprensivo—. Ya ha
pasado todo. Nico irá mañana a ayudarla en casa pero, por favor, si tiene algún
trabajo que hacer fuera de casa, pídamelo a mí. Prometo hacerlo sin rechistar.
Estela miró a Blas,
compungida, y este la atrajo hacia sí y la abrazó con afecto.
“Ay, Blas”, pensó la mujer, “si pudiera confiarte el problema que tengo,
pero no creo que hicieras desaparecer el cadáver de Salvador sin rechistar”.
El señor Teodoro dejó a
Estela en su casa y se dirigió a villa de Luna.
Aparcó el todoterreno en el garaje y fue hacia su habitación. No creía que
pudiera dormir pero, al menos, descansaría unas horas. Pensó en subir a ver a
Nicolás, desistió de su idea porque supuso que el niño estaría dormido. Entró
en su alcoba, se desvistió y se puso el pijama. Iba a meterse en la cama cuando
unos golpes procedentes de la habitación de Nicolás lo dejaron paralizado. ¿Quién estaba allí dentro?
El joven fue hacia la puerta con rapidez. Giró la llave que había en la cerradura y abrió.
Nicolás permanecía en el
suelo, de espaldas y, de vez en cuando,
daba furiosos manotazos. Al abrirse la puerta, el chiquillo cayó hacia detrás,
ante el enorme asombro de Blas. El hombre ayudó al chaval a ponerse de pie. El
niño estaba muy agitado y respiraba con dificultad.
—¡No quiero estar encerrado! —dijo, excitado— ¡No soy un delincuente!
Blas abrazó al chiquillo
y besó su cabeza.
—Cálmate, hijo —le habló suavemente—. Cuéntame qué ha
ocurrido.
Nicolás se quedó
boquiabierto. Blas le había llamado “hijo”
y lo estaba tratando con mucho cariño. No demostraba estar enfadado con él tras el suceso del cementerio.
—¡Elisa
es una bruja! —exclamó el muchacho, alterado— ¡Ella me ha
encerrado! Me ha mirado como si me odiara. No me extraña que sea hermana de mi
padre. Es tan repugnante como él. ¡No quiero volver a verla nunca! ¡No quiero
vivir con ella!
Blas, desconcertado, no
podía creer lo que estaba oyendo. Elisa
siempre se había mostrado muy cariñosa con el niño.
—Explícame qué ha pasado —pidió con serenidad.
—Nat y Bibi estaban en mi habitación —comenzó a contarle Nicolás—, hablábamos en voz baja, no estábamos alborotando. Ella entró, furiosa, envió a
las chicas a dormir y a mí me trajo aquí. Dijo que si no la obedecía, te diría
que le había faltado al respeto. ¡Me miró con odio y con asco!
El señor Teodoro conocía
muy bien a Nicolás, no era un muchacho rencoroso y sería incapaz de inventarse
algo así. Cuando hacía algo mal, agachaba la cabeza y aceptaba su castigo sin
abrir la boca.
En aquel momento, el crío
estaba muy dolido y rebotado porque, sin duda, se había cometido una injusticia o un abuso
con él.
Blas no podía entender la
actitud de la mujer.
—Hablaré con Elisa por la
mañana —aseguró al chiquillo—, y quitaré
la cerradura de esta puerta y los barrotes de la ventana. Ahora acuéstate en
mi cama, dormirás conmigo. Voy un momento a la cocina.
Nicolás se
metió en la cama de su tutor, sintiéndose mucho más tranquilo. Le extrañó que
Blas no le hubiese reñido y no se hubiese puesto de parte de Elisa.
“Ojalá fueses mi
padre, Blas”, pensó el muchacho. “No
dejes que Bruno se acerque nunca más a mí”.
El señor Teodoro regresó
a la habitación trayendo consigo dos tazones que despedían calor.
—Es tila —le dijo al niño,
ofreciéndole un tazón—. Nos sentará bien a los dos.
Nicolás bebió la tibia
infusión, estaba agotado y se fue relajando paulatinamente. Había sido aquel un
día con demasiadas emociones y no tardó en quedarse dormido, descansando su
cabeza en el brazo derecho de Blas.
De vez en cuando sufría
algún espasmo y su respiración, a veces, era acongojada.
Su tutor vigilaba su
sueño y le susurraba palabras tranquilizadoras.
ῳῳῳ
Estela Miranda relató a
su hija Gabriela cómo Blas había enterrado la carta destinada a Jeremías.
—El cementerio daba miedo, daba horror. ¡Es todo tan diferente por la noche! Tan solitario, silencioso, lúgubre, tétrico... ¡Pobre
Nico! —terminó
diciendo la mujer.
—Mamá, creo que deberíamos hablar con Blas y
contárselo todo —dijo Gabriela, siendo de la misma opinión que
Bibiana.
Estela se negó con un
enérgico movimiento de cabeza.
—Blas es muy buena persona, a pesar de todo va a consentir que Nico siga viniendo aquí —reconoció—. Pero no creo que
aceptase deshacerse de Salvador sin más. No podemos olvidar que es un hombre muy recto.
Voy a acostarme, debo
pensar con calma. Tiene que haber un modo de solucionar el problema de una buena vez.
ῳῳῳ
El señor Teodoro saltó de
la cama a las ocho de la mañana, le había resultado imposible pegar un ojo.
Nicolás, en cambio,
dormía profundamente.
El joven se dirigió al
baño y se duchó. Seguidamente se vistió con un chándal y unas deportivas. Llevó
los tazones a la cocina y salió a correr.
El cielo tenía un color
grisáceo y hacía mucho frío. Las hojas de los árboles y las agujas de los pinos
estaban muy quietas. Reinaba la paz.
Blas corrió velozmente, y
descendió hasta el pueblo, dio una vuelta al mismo, compró dos hogazas de pan recién horneado, ese pan tan añorado en las grandes ciudades, y luego regresó a la
urbanización. Le gustaba correr, esta afición le había convertido en un
corredor excelente. El ejercicio le ayudaba a quemar adrenalina y a relajarse.
Volvió a ducharse y se
cambió de chándal.
En la cocina, se preparó un
tazón de tila.
Nadie se había levantado
todavía y tomó la infusión, pensativo, cogitabundo.
A pesar de la carrera,
estaba de un humor de perros.
Págs. 335-341
El siguiente capítulo saldrá el próximo jueves.
Si yo fuera Rey Mago haría realidad el mejor de vuestros sueños.
Un abrazo.
Pídele a los Reyes con plena confianza de recibirlo, Mela.
ResponderEliminarLo mejor que le ha podido pasar a Nicolás es darse cuenta de cómo es Elisa. Cuántas veces tenemos el enemigo muy cerca y no lo vemos, precisamente por esa cercanía.
Los celos encaminan mal a Elisa, para conquistar a Blas, antes debe conquistar a Nicolás.
Un abrazo, guapa.
Hola amigo, algo le pediré al rey Baltasar, tenlo por seguro.
EliminarSí, Nico va a tener que enfrentarse a una realidad que no le va a gustar y que le va a decepcionar. Tiene que ser muy duro comprender que alguien en quien confiabas no te quiere bien.
Creo que aciertas, si no conquista a Nico, difícil lo tendrá con Blas.
Un abrazo!!
Hola Mela, espero que lo tengas todo bien organizado para la Noche Mágica.
EliminarYo voy a pasarla con mi madre y mi hermana, de amigos ya tuve bastante en Nochevieja. No sabes la de veces que rodeado de "amigos" me he sentido solo. Cuídate mucho y diviértete.
Pasar la Noche de Reyes con tu madre y tu hermana me parece un buen plan. Lo importante es estar con personas que te encuentres a gusto y disfrutar el momento.
EliminarYo entendí que te lo habías pasado bien en Nochevieja.
No me ha pasado eso de los amigos porque nunca he estado rodeada de muchos. Supongo que hay mucha gente con dos caras, una lástima.
Tengo que dejarte o alguien me mata. Esta tarde estaré libre.
Un abrazo y muy feliz Noche!!
Hola Mela, soy Julia, la hermana de Anónimo. He querido entrar para desearte un feliz Roscón y que tu rey Baltasar te haga feliz.
EliminarNo me gusta que mi hermano entre tanto, me desagradaría que te incomodara pero él no me hace ni caso.
Lo pasó estupendo en Nochevieja, está saturado de tanta fiesta.
Yo por mi parte quiero felicitarte porque te admiro mucho y te has convertido en mi escritora number one. jeje Blas Teodoro me vuelve loca y mi madre está angustiada porque el cadáver sigue en el congelador. Es un honor poder dirigirte a la escritora que admiras y que ella te conteste. Muchas gracias.
Yo no entraré a comentar, no padezcas, ya entra bastante mi hermano. Hoy he querido saludarte. Un beso.
Hola Julia, encantada de que me saludes y el honor es mio por recibirte en mi estación. Me alegra mucho que te guste el libro y que Blas te vuelva loca. jaja
EliminarSaluda a tu madre de mi parte y dile que no se angustie, todo se solucionará.
Te agradezco tus amables palabras y espero que sigáis disfrutando con la historia.
Me encanta que tu hermano entre a comentar, no me molesta en absoluto. Él me anima mucho, se le ve muy buena persona.
Te deseo una noche mágica y que los Reyes Magos sean muy generosos contigo.
Ha sido un placer conocerte. Besos.
Somos afortunados para los tiempos que corren, nos conformamos con tener salud. A Blas Teodoro también lo veo afortunado, privilegiado, pero tiene problemas como todo el mundo. Los ricos también lloramos.
EliminarA ti también te deseo mucha salud, Mela.
Tener salud es el más bello regalo y lo valoramos muy poco cuando lo tenemos. Sin embargo, si lo perdemos, es el regalo que más lloraremos.
EliminarMuchas gracias Julia, y me alegro de que estés bien a pesar de los tiempos que corren. Es un alivio encontrar personas que están bien. Por supuesto que los ricos también lloran, tengo muy claro que el dinero no da la felicidad.
Blas Teodoro es un hombre rico y muy poderoso, ya lo irás viendo, pero es un hombre que va a llorar y a sufrir mucho, ya lo verás.
¡Ay Mela! De eso nada, no quiero ver sufrir a Blas. ¡Ay que horror!! Pero ¿por qué, cuál será el motivo?
Eliminarjajajaja Perdona que me ría, Julia. Me parece que ya he hablado demasiado, comprende que no puedo contar nada. Una historia debe ir descubriéndose poco a poco, página tras página.
EliminarYa veo lo mucho que te gusta Blas, siempre digo que Blas es un personaje que gusta o disgusta.
Un abrazo y disculpa que no pueda saciar tu curiosidad.
¡Vaya con mi hermana y criticándome a mí! ¡Menuda cosa le has dicho, ahora ya no vive! Vamos a salir a ver si vemos algo de cabalgata y después cenaremos, ya tenemos la mesa reservada. Pasaremos la velada con mis tíos y algunos primos.
EliminarTú eres un hada escribiente, el mundo de la magia lo conoces muy bien.
¡Feliz Noche!
Feliz noche, amigo.
EliminarFue una noche mágica. Empiezo la semana con la única preocupación de no aburrirme. El miércoles vuelvo al trabajo. Espero que el rey Baltasar haya cumplido. ¿Preparando el siguiente capítulo?
EliminarMe alegro que fuera una noche mágica y espero que no te aburras estos días. Siempre surge algo que hacer.
EliminarEl rey Baltasar siempre cumple. El capítulo está preparado, mas bien sigo en la lucha de terminar esta historia.
Feliz semana, amigo. Y saluda a Julia de mi parte jajaja
Julia dibujó ayer a Blas. ¡Tendrías que verlo! Tiene muy buenas manos, creo que lo ha clavado.
Eliminarjajajaja Me encantaría ver el dibujo, yo tengo malísimas manos para dibujar y muy poca paciencia.
Eliminarjajajaja te lo contó mi hermano, eh!!! Muchas veces es un bocazas, más adelante dibujaré a Nico porque mi madre es fan del chaval. Me gusta dibujar, pero no he clavado nada, créeme. ¡Qué pases un buen día!
EliminarHola Julia, estoy segura de que tus dibujos valen la pena y mucho. ¡A ver si un día tengo la suerte de echarles un vistazo!
EliminarUn abrazo.
Vaya, vaya con Elisa, los nervios han podido con su enamoramiento!!!!!! A ver si las cosas van aclarándose un poco Mela, que yo estoy mosca con el fiambre, la Sra. Estela ya está que se sale con su imaginación y creo que el pobre Blas cuando se entere de todo, no sé que va a hacer!!!!
ResponderEliminarBueno que los Reyes traigan mucha paz a todos.
Un beso.
Hola guapetona!! Ya me has alegrado la estación, mira por donde.
EliminarElisa se ha dejado llevar por los nervios o tal vez es muy complicado tapar el sol con una mano.
Estás mosca con el fiambre... jajaja ¡Es que me divierto! Yo te aseguro que lo del fiambre se va a resolver, Estela va a tener otra idea (la peor de todas).
Ya veremos si Blas se entera o no se entera.
Desde luego a estos personajes míos les vendría muy bien que los Reyes les trajeran paz.
Te deseo muy Feliz Roscón de Reyes y que los Magos de Oriente vengan muy cargados.
Un abrazo!!
Hola Mela: Me lleva!! Y ahora qué???? Otras vez celos de Nico /:I
ResponderEliminarPobre Estela la agobian los remordimientos, pero que testaruda igual que Nico se niegan a confiar en Blas!!...
Verems que sucede, la verdad que esa actitud de Elisa es horrible!! Y si sigue así Blas más que terminar declarándose va a terminar alejándose =(
Bueno Linda estaré esperando el próximo capi con ansias...
Besotes =)
Hola encanto, sí, los celos atacan de nuevo o a lo mejor seguían ahí.
EliminarDespués de estar en el cementerio, Estela se da cuenta de que le había pedido al niño una barbaridad. ¡Estela y Nico son dos cabezones!
Creo que tienes mucha razón, Elisa puede conseguir que Blas se aleje.
Se te extrañaba por la blogosfera, me alegra que estés de vuelta.
Te deseo un gran final de fiestas y que los Reyes Magos sean muy generosos contigo.
Un abrazo!!
Hola, Mela, me paso a dejarte mis cariños y mis mejores deseos en este nuevo año que inicia, que recibas muchas bendiciones y todos tus deseos se vuelvan realidad.
ResponderEliminarBesos.
Muchas gracias Aglaia, yo también te mando mucho cariño y te deseo lo mejor para el 2013 que termina de nacer.
EliminarTe voy a desear sobre todo mucha salud y mucha ilusión. Que no pase ni un día del Año Nuevo sin que tú sonrías.
Un abrazo!!
Hola, Mela. Opino como Anónimo. Para conquistar a Blas, Elisa no lleva buen camino, porque aunque yo no esté de acuerdo con ciertas acciones de Blas, sí tengo claro que quiere al chiquillo. Es bien cierto que a veces el enemigo lo tenemos al lado y que la confianza y el cariño no nos deja verlo. Una decepción muy gorda se va a llevar Nico si Elisa continúa comportándose como una cafre. Hay cosas que no tienen disculpa.
ResponderEliminarUn abrazo y hasta el próximo jueves. Que los Reyes Magos se porten bien contigo.
Hola Nena, otra guapetona por la estación.
EliminarElisa ha errado el camino. No sé si preferiría vivir sin saberlo y no enfrentarme a la realidad de que alguien en quien he confiado no era merecedor de tal cosa.
Nico se llevará una decepción y dicen que así se va aprendiendo.
Baltasar es bastante bueno conmigo. Te deseo un feliz final de fiestas y que los Magos de Oriente te escuchen.
Un abrazo!!
Hola Mela, me pregunto qué tienen en la cabeza Estela y Nico, dos tozudos de cuidado son.
ResponderEliminarMiedo me da el tercer plan de Estela. Elisa está enseñando las uñas o la escoba.
Espero que los Reyes se porten bien contigo, disfruta el final de fiestas.
Hasta el 45!!!
Hola Oskar, un guapetón por la estación. Que no se diga que a los chicos no os trato bien.
EliminarEstela y Nico no quieren que Blas se entere y nadie los saca de sus 13.
El tercer plan de Estela te da miedo... jajaja
Sí, parece que Elisa no es lo que parecía. Veremos en adelante.
El rey Baltasar se porta muy bien. Disfruta tú también del final de fiestas y pide muchas cosas a los Reyes.
Hasta el 45!!
Vaya yo también me pregunto ,que mosca le a picado Elisa para tratar al muchacho con ese carácter desabrido,desde luego el muerto esta causando estragos psicológicos en todos los que están en el ajo.
ResponderEliminarHola Delavega, otro guapetón por la estación.
EliminarA Elisa le ha picado la mosca de los celos, no puede soportar que Blas esté tan pendiente de Nico.
"El muerto está causando estragos psicológicos", me he reído tanto al leer esto, qué menudo acceso de tos he tenido. Estoy sola con Ginger y mi angelote cree que estoy muy loquita. Bueno, lo cierto es que está muy acostumbrado a mí.
Termina de pasar bien las fiestas y no te olvides de pedir algo a los Magos de Oriente.
Un abrazo!!
Bueno Mela, al menos los Reyes nos han dejado un pre-regalo con este nuevo capítulo que creo andábamos todos esperándolo con ganas. Vaya! ahora que a medias se había librado de un castigo por parte de Blas, va Elisa y lo castiga ella sin motivo.. jajajaja pobre niño, en serio, que le caen por todas partes.
ResponderEliminarY yo intrigadísima de saber cómo irá todo.
Besitos!
Hola FG, otra guapetona por la estación.
EliminarMe alegra muy sinceramente que me digas que este capítulo es como un pre-regalo de los Reyes. Tú eres un gran regalo para esta estación.
Sí, a Nico le caen por todas partes. Lo que le ha hecho Elisa ha estado muy feo.
Me encanta que estés intrigadísima!! Buen final de fiestas y a pedir a los Reyes, que pedir es gratis, y a lo mejor te lo conceden.
Un abrazo!!
Muy interesante... Voy a ver si voy encontrando tiempo para ponerme al día de la historia.
ResponderEliminarAbrazos.
Hola Pablo!! Estoy muy contenta de que te parezca interesante y estaré encantada de acompañarte por el camino.
Eliminar¡Buen final de fiestas! Y que los Reyes Magos te traten muy bien.
Abrazos!!
Bieeeeeeeeeen!!!!!
ResponderEliminarChica que ganas tenía de seguir la historia y cuanto hay que pensar
Claro que le ha dicho hijo!!!
Puff, venga, a ver si pasan las fiestas
Besos
Hola preciosa, ¿qué quiere decir "claro que le ha dicho hijo"? Como te lea Lidia, dirá que hace mucho tiempo que ella dice que Blas es el padre de Nico.
EliminarYo no digo ni que sí ni que no... en su momento se verá... jajaja
¿Qué quiere decir "Puff"? Oye, faltan por venir los Reyes de Oriente y estoy segura de que van a ser muy Magos contigo.
Disfruta del Roscón, yo ya lo he comprado. Lo tengo en el congelador, aaayyy congelador! Como empiece a asociar ideas soy capaz de tener miedo esta noche.
Bueno, mi roscón es de nata y tenía pensado indagar a ver dónde se encuentra la figurita, una pequeña trampita. Pero, ahora, ya no me acerco.
Un beso muy fuerte.
No, si yo también lo creo y además sabes que ese hombre me encanta!!!
EliminarPara mi Reyes es especial, pero chica, ya he comido tres roscones de reyes en lo que va de fiestas jajaja
Besos!!!!
Pero bueno, ahora resulta que eres una golosa jajaja
EliminarEl día de Reyes ya lo creo que es especial, es el día más bonito del año. Por lo menos, a mí me lo parece.
De pequeña era mi día favorito y sigue siéndolo. Te estoy contando un secreto, a nadie antes le había confiado que el día 6 de enero es mi preferido del año.
He entendido que crees que Blas es el padre de Nico... jejeje, ya se verá. y aunque no te lo creas, tú también le encantas a él, me lo ha dicho.
Un beso.
jajajajaj ya he llegado a qui al meollo del tema, si chicas, ya hace tiempo que lo voy diciendo.... ¿Que más tienes en el congelador aparte del Roscón? jajajajajajajaj
Eliminarpor cierto me tocó la figurita, fuí la reina, jajajajja que menos!!!!
Un beso a las dos.
Hola Lidia!!! Si ya le decía yo a Silvia que como tú la leyeras... jajajaja
EliminarPero que quede claro que yo no digo ni que sí ni que no.
En mi congelador sería raro meter un cadáver porque tiene cajones jajaja Pero, en serio, que la otra noche me asusté algo.
Yo también fui la reina de la fiesta porque pillé la figurita, al rey Melchor. Y sin hacer trampa jajajaaja
Un beso, simpática!!!
Yo tuve tarta de cumpleaños, pero fue un secreto. Así que.. ¿quién fue la reina? :PP
Eliminarjajajaja
Besos
Ahora sí que te has quedado con nosotras, a mí me has dejado con la boca abierta. ¡Menos mal que no pasaba ninguna mosca! ¡Tu cumple el 6 de enero! ¡Tienes que ser una chica mágica por fuerza! ¡Muchísimas felicidades! No sé me olvidará tu cumple.
EliminarSin duda vamos a tener que cederte el papel de reina a ti sin protestar. jejeje
Bueno quizás sean celos pero en el fondo lo quiere ,por otro lado el detalle de Blas de llamar hijo al chico da que pensar en cuanto a los sentimientos hacia el.Que tramaran ahora para deshacer el nudo gordiano en que se a convertido el fiambre en el congelador.Veremos,Saludos.
ResponderEliminarHola Fidel, estoy de acuerdo contigo en que Elisa quiere a Blas, pero me parece que lo quiere a su manera. Y el amor de Elisa se ha vuelto posesivo y egoísta.
EliminarDe todos modos me parece muy bien romper una lanza en favor de Elisa ya que es muy humano lo que le sucede. A cualquiera de nosotros nos podría suceder. Lo de siempre, vemos mucho la paja ajena y no vemos nuestra enorme viga.
Yo creo que a estas alturas de la historia ya podemos decir que Blas quiere mucho a Nico sin temor a equivocarnos.
Entre Estela y Nico no esperes nada bueno, han perdido el norte y no creo que tramen nada con sentido común para deshacerse del cadáver.
Te deseo un final de fiestas muy feliz y que los Magos de Oriente hagan realidad tus sueños durante 2013.
Un abrazo, guapetón!!!
No quería pasar sin desearte que te traigan muchas cositas los Reyes.
ResponderEliminarDisfruta del día y come mucho Roscón que tenemos todo el mes de Enero para ponernos a dieta.....jajaja y el de febrero.... y el de Marzo.....jajaja ( no me gustan las dietas pero....).
El lunes continuo con el siguiente capítulo.
Muchos besitos
Hola simpática!! Ya veremos si el rey Baltasar se porta bien jajaja
EliminarHabrá que disfrutar este último tramo de fiestas, el roscón está aguardando en el congelador jajaja A mí tampoco me gustan las dietas pero tampoco me gustan los kilos. ¡Qué problema!
Espero que pases muy buen día y que los Reyes Magos te dejen muy contenta.
Un abrazo!!
Tal vez si que sería buena idea contárselo a Blas. Un hombre sensato y buena gente... estaría bien. Total se enterará más pronto o más tarde. Y Elisa... ¡qué cerda! Sufro mucho cuando encierran a alguien. ¡Esto está que arde! Gracias, Mela, un beso
ResponderEliminarHola Mere, yo creo que sería sensato hablar con Blas, pero Estela y Nico están un poco lejos de la sensatez. Sí que te ha puesto nerviosa Elisa, jajaja Lo que pasa es que eres muy noble.
ResponderEliminarUn beso para ti, Mere, y muy contenta de que vuelvas a la estación después de la Navidad.
No me explico como Blas, no ha castigado a Nico por dejarse encerrar sin permiso...
ResponderEliminarSe esta convirtiendo en un blando...
A ti es muy difícil tenerte contento, Kikas. Eres el lector más rebelde y más inconformista de la Estación, que lo sepas.
EliminarGracias a los inconformistas el mundo evoluciona, nunca lo olvides, Mela...
ResponderEliminar;-)
Nunca lo olvidaré y tengo que estar de acuerdo contigo, aunque me duela.
EliminarParacetamol para el dolor, ya sabes...
ResponderEliminarEste dolor no se va con el paracetamol.
EliminarTe voy a dar un beso merecido porque te noto un poco enfadado. Y no te puedes imaginar cómo está soplando el aire en Castellón en este momento, me parece oír tus rugidos. jajaja
No te enfades, Kikas, que en peores plazas habrás toreado.
No entiendo nada. ¿Y ahora a Elisa qué le ha dado? Otro Hulk XD
ResponderEliminarA Elisa le ha dado un buen ataque de celos, está muy harta de que Blas solo viva y esté pendiente de Nico. Loa celos no son buenos.
EliminarSí pero no tiene sentido. Le han entrado los celos de la noche a la mañana. Y además se trata de un niño, no una mujer de 25 años xD
EliminarEso está claro. Hasta ahora había fingido y de repente ha explotado. Todos tenemos un aguante o un limite.
EliminarQue capítulo ¡¡más bonito!!, me gusta mucho cuando Blas es tierno.... pero vaya esta vez le toca a Elisa ser mala... los celos nunca son ni serán buenos.
ResponderEliminarMuchos besos y que pases un buen fin de semana.
Hola guapísima, me alegra leerte.
EliminarTienes mucha razón, los celos no son buenos y traen demasiados problemas.
Creo que una persona celosa no se valora a sí misma, no tiene confianza en sí misma.
Yo también te deseo un buen fin de semana.
Muchos besos!!!
Desde luego, creo que no tiene confianza en si misma o miedo a estar solo/a.
EliminarBesos
Pero estar con alguien que no te quiere es peor que estar solo. Yo creo que el amor de Elisa es de estos amores obsesivos y posesivos.
EliminarBesos
Que bien hizo Bibiana en ahcerles ver que lo mejor es contarle todo a Blas! lastima que Nico es testarudo!
ResponderEliminarNico es muy testarudo, sí.
EliminarElisa se ha cegado por los celos! y ahora Blas la verá de un modo en que ella no es,no comprendo porque ella vive los problemas de Blas como una perdida,si conviviera con el tambien pasaria por estas cosas porque un hombre con tantissimos problemas no tiene ni tiempo ni cabeza para otras cosas!
ResponderEliminarLos celos no son buenos y traen malas consecuencias.
EliminarSe ha metido con el niño mas amado por Blas pobre Elisa creo que esos inoportunos celos le costarán caro,que buenop que Gabriela piense como Bibi! ojalá hablen y saquen esta mochila de las espaldas de Nico!
ResponderEliminarA ver si tienes razón y hablan con Blas.
EliminarEn el internado Nico lo pasaría mal pero anda que aquí... vaya días (y noches) le están dando entre todos!!
ResponderEliminarQue le preparen un barreño de tila a Elisa, que esos celos locos con un niño no le van a traer más que disgustos.
Sigo al 45.
Pues sí, pero estoy segura de que Nico prefiere estar donde está
EliminarLos celos nunca son buenos... y mucho menos hacia un niño
Pues en el 45 nos encontraremos ;-)
Ahora nos vuelves a dejar con una nueva intriga con Elisa
ResponderEliminara ver cómo sale eso. Espero que no se vaya la luz
en el pueblo que si no, la que se lía.
Un capitulo bien narrado como de costumbre Mela.
Besos con sabor a tila
Hola Cielo... La verdad es que Elisa está un poco rara
Eliminarjajaja... Esperemos que no se vaya la luz
Gracias
Entonces, estos son unos besos tranquilos ;-)
Besos con sabor a tila