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Tamara Villanueva.
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CAPÍTULO 63
UNA PEQUEÑA TRAMPA
C
|
uando la cena estuvo
servida sobre la mesa, Elisa se presentó en el salón. Iba vestida con un pijama de seda de color rosa pálido.
—Podrías colaborar un poco más en casa, ¿no te
parece? —le recriminó
el señor Teodoro con dureza.
—Yo no despedí a Sandra —contestó la mujer en un tono muy antipático.
—Sandra no volverá a poner un pie en esta casa —afirmó, rotundo, el
señor Teodoro.
Emilia se acercó al sofá
donde estaban su hijo y Nicolás. La señora llevaba un plato con una tortilla a
la francesa.
—Anda, ve a cenar, Blas. Yo le daré la tortilla
al niño. Está calentita, recién hecha, le sentará bien.
El joven se fue hacia la
mesa y la señora Sales se sentó junto a
Nicolás. Troceó la tortilla y pinchando un pedazo, con el tenedor, lo introdujo
en la boca del chaval.
—¿Qué ocurre con Nico? —indagó Elisa.
—Tiene fiebre —respondió Emilia.
—¡Ah!, entonces es posible que el mundo
concluya su existencia cotidiana —declaró Elisa con ironía —. Y tú, Blas, deberías emborracharte para olvidar que el niño está enfermo y cierta obsesión. Beber bastante cantidad de vino puede ayudar a limpiar tu mente y despejarla.
El señor Teodoro la miró,
con furia, pero prefirió no discutir con ella por deferencia a
los niños.
—Veremos cómo está mañana —declaró Blas—. Buenas noches, mamá.
El hombre besó a la mujer y se fue a su habitación. Nicolás estaba acostado. El señor Teodoro se acostó junto a él y le dio de beber agua cada vez que tuvo un acceso de tos. También lo despertó dos veces para darle jarabe y pastillas.
—Me dejarás ir a la fiesta, ¿verdad, Blas? —era la pregunta del muchacho cuando su tutor lo despertaba.
—Ya veremos, Nico —era la respuesta del joven.
Bibiana tuvo la fuerte
convicción de que el gran consentido de aquella casa era Nicolás. Natalia hacía lo que quería porque, en
realidad, Elisa pasaba de ella. Sin embargo, Nicolás estaba muy arropado y
protegido tanto por Blas como por Emilia. Jamás en su vida alguien le había
dado comida a la boca por el hecho de tener fiebre.
El niño se terminó la
tortilla y la señora Sales le dio otro vaso de agua templada con limón y miel.
—¿Cómo estás, cariño? —le preguntó la mujer.
—Estoy mucho mejor —mintió el muchacho con
voz ronca—. Emilia,
mañana quiero ir a la fiesta de Nochevieja. Prométeme que iré.
—Claro que sí, tesoro —sonrió la señora—. Mañana estarás
completamente bien. Ahora lo mejor es que te acuestes. Descansar te irá bien.
El chiquillo asintió, muy
dócil. Se levantó y se aproximó a la mesa para dar las buenas noches y decir
que se iba a dormir.
—Acuéstate en mi cama —le dijo su tutor.
—Vale —aceptó Nicolás, sumiso.
El señor Teodoro cenó
poca cosa, se dirigió a la cocina seguido de su madre. Allí cogió una jarra de
agua con limón y miel que la señora Sales había preparado, también cogió jarabe,
una caja de pastillas y un termómetro.
—Cariño, el niño tiene mucha ilusión de salir
mañana —comunicó
Emilia—. Ten en
cuenta que este va a ser el primer año que celebramos la Nochevieja fuera de
casa. Supongo que la fiebre le bajará y, aunque tenga una poca, no va a pasar
nada. —Veremos cómo está mañana —declaró Blas—. Buenas noches, mamá.
El hombre besó a la mujer y se fue a su habitación. Nicolás estaba acostado. El señor Teodoro se acostó junto a él y le dio de beber agua cada vez que tuvo un acceso de tos. También lo despertó dos veces para darle jarabe y pastillas.
—Me dejarás ir a la fiesta, ¿verdad, Blas? —era la pregunta del muchacho cuando su tutor lo despertaba.
—Ya veremos, Nico —era la respuesta del joven.
El señor Teodoro pasó muy
mala noche, tocando constantemente la frente del niño. A las siete de la mañana
volvió a ponerle el termómetro sin que el chaval se enterara. La temperatura
había descendido a treinta y siete grados y medio. Blas comenzó a
tranquilizarse y consiguió quedarse dormido. A las diez, la señora Sales acudió
al dormitorio llevando una bandeja con dos vasos de zumo de melocotón y unas
tostadas con mermelada de frambuesa.
Aquella mañana tenía un
aspecto inmejorable, un sol esplendoroso lucía en un cielo azul muy intenso.
Del manto blanco de nieve quedaban algunos restos que los rayos del sol
parecían querer borrar por completo.
La mujer sonrió, con
ternura, viendo a sus dos grandes amores durmiendo pacíficamente. Colocó las
patas de la batea de manera que Nicolás quedó en el centro de la misma. El niño
se despertó.
—Tómate el vaso de zumo y dos tostadas —susurró Emilia.
Nicolás se incorporó y se
sentó en la cama. Miró al señor Teodoro que continuaba dormido a su lado.
—¿Cómo te encuentras? —preguntó la señora Sales
en voz muy baja. No quería despertar a su hijo, suponía que habría descansado
muy poco durante la noche.
El señor Teodoro notó
cierto movimiento y se despertó, pero no abrió los ojos.
—Estoy muy bien —respondió el chiquillo
con afonía.
Bebió lentamente el zumo,
la garganta le seguía doliendo y al tragar percibía más el dolor—. Quiero ir esta noche a la
fiesta —manifestó,
desalentado—. Pero no sé
si Blas me va a dejar. Convéncelo, Emilia, a ti te hace caso.
La señora Sales tocó la
frente del niño y le pareció que aún tenía fiebre.
—Tendré que darte antibiótico —declaró—. A Blas no le va a hacer
gracia, pero es que sigues teniendo fiebre.
—Pues dámelo y no se lo diremos —solucionó el chaval—. Blas es un pesado y
estoy seguro de que sigo teniendo fiebre por culpa de él, porque me pone
nervioso. Hoy me vigilas tú la temperatura, él que no me ponga el termómetro.
También podemos romperlo o esconderlo.
Emilia suspiró, moviendo
la cabeza negativamente.
—¡No empieces, Nico! —exclamó sin alzar la voz— No se te ocurre idea
buena. ¿Es que quieres quedarte sin salir esta noche? Procura no hacer enfadar
a Blas hoy. Ten más picardía y más sentido común.
El señor Teodoro simuló
un bostezo y fingió que acababa de despertarse. Abrió los ojos y sonrió a su
madre.
—Buenos días —saludó, incorporándose
hasta quedar sentado—. ¡Vaya, esto sí que es un lujo! ¡El desayuno
en la cama! ¡Me muero de hambre!
La señora Sales se
percató del cansancio que reflejaba su rostro. El joven cogió el vaso y se
bebió el zumo de un trago. Luego atacó las tostadas y las devoró, con apetito,
ya que la noche anterior había cenado muy poco.
Nicolás, que comía con
desgana su primera tostada, le ofreció la segunda a su tutor.
—Cométela tú —le dijo—. Parece que tienes
hambre.
—No, Nico —se negó el hombre,
levantándose—. Ya comeré
algo más en la cocina.
—Blas, yo quiero ir esta noche a la fiesta. Me
hace mucha ilusión. Déjame ir, por favor —le rogó el chiquillo—. Te prometo que no
volveré a salir desabrigado a la calle.
El señor Teodoro miró al
muchacho, seriamente.
—A las siete de la tarde te pondré el
termómetro —manifestó—. Si tu temperatura es
superior a treinta y siete y medio... no habrá fiesta.
Seguidamente se dirigió
al cuarto de baño.
—Idiota más que idiota —masculló Nicolás, malhumorado.
ῳῳῳ
Nicolás permaneció toda
la mañana en la habitación y también comió allí. Se aburría como una ostra y de
cuando en cuando Natalia y Bibiana iban a hacerle compañía. Emilia le dio
antibiótico y le aconsejó que continuara en la cama para recuperar fuerzas.
El señor Francisco llamó
por teléfono diciendo que debían reunirse a las ocho en un almacén de Luna que habían acondicionado como salón
para celebrar la despedida de un año y la llegada de otro.
El señor Teodoro le
explicó que Nicolás estaba enfermo y que, tal vez, él y el crío no pudieran
asistir.
—¡Ese
muchacho es más fuerte que una roca! —vociferó el señor
Torres, contrariado— ¡Tenéis
que venir a la fiesta! ¡Hay que
recibir el Año Nuevo como Dios manda!
Gabriela decidió que ella
tampoco iría a la fiesta en cuanto se enteró de que el niño tenía fiebre. Si Blas y Nicolás no iban, ella se quedaría
con ellos. Lo mismo pensaban Natalia y Bibiana, pero Patricia quería salir
a toda costa.
A las siete menos cuarto,
la señora Sales fue a la habitación de su hijo y le puso el termómetro a
Nicolás. El niño tenía treinta y ocho grados.
—¡Ay, Nico! —exclamó la mujer,
disgustada— Sigues
teniendo fiebre alta.
—No se lo digas a Blas, yo me encuentro bien.
Quiero ir a la fiesta —imploró el muchacho.
Emilia manipuló el
termómetro y este bajó a treinta y siete grados.
—Vamos a hacerle una pequeña trampa a Blas —le dijo al chaval—. Pero en la fiesta bebe
solo agua y no comas demasiado. Tampoco hagas el burro, ¿de acuerdo?
El chiquillo asintió,
entusiasmado. Se había pasado el día entero
en la cama con el único fin de ir a la fiesta, no sería justo quedarse en casa.
El señor Teodoro entró en
el cuarto a las siete y su madre le mostró el termómetro.
—Está bien —dijo—. Nico, puedes
levantarte, ducharte y vestirte. Saldremos a celebrar la Nochevieja. Pero aún
tienes algo de fiebre. No quiero que hagas el loco o te podría subir. ¿Me has oído bien?
—Me portaré de maravilla —aseguró Nicolás, sonriendo
ampliamente.
ῳῳῳ
Las niñas corrieron a
prepararse, alborotadas, en cuanto se enteraron de que Nicolás sí iba a ir a la
fiesta. A las ocho menos cuarto todos estaban de etiqueta y se reunieron en el
salón. Las muchachas y la señora Sales vestían traje largo, estaban elegantes y
muy guapas.
Bibiana se quedó
boquiabierta cuando vio a Nicolás con un traje azul marino, camisa de un tono
más claro y corbata a rayas a juego con el traje y la camisa. Vestido de esta
forma parecía más mayor y le recordó terriblemente a Blas. Era increíble el parecido existente entre el muchacho y su tutor.
—Estáis muy guapas —sonrió Nicolás, radiante,
a pesar de no encontrarse nada bien. ¡Maldito
catarro! No iba a permitir que le
fastidiara la noche.
Todos cogieron abrigos y
subieron al todoterreno del señor Teodoro. Todos, excepto Elisa... que tenía otros planes.
Págs. 487- 493
Hoy os dejo una canción en el lateral del blog. Es de la Quinta Estación. "El Sol no regresa"
Hoy os dejo una canción en el lateral del blog. Es de la Quinta Estación. "El Sol no regresa"
Hola Mela: Me estoy que caigo de sueño...pero no podía dejar pasar esto!!! Esta Emilia es fatal jijiji engañar a su propio hijo para ayudar a Nico a ir a la fiesta >u<
ResponderEliminarSigo considerando que Blas es un amor....
Que esa bruja se ha quedado porque tiene otros planes (me refiero a Elisa)...Esto me huele muuuuuy mal =/
Bueno ahora sí me despido mañana vuelvo y cualquier cosa arreglo este desastre de comentario jajajaja
Besotes amiga =)
Hola Silvia... pues ya somos dos las que nos caemos de sueño.
EliminarYo, hasta que no me duche, no me voy a poder despejar.
Tu comentario está muy bien, nada tienes que arreglar.
Bueno, es Nochevieja, y Emilia sabe que Nico tiene mucha ilusión de asistir a la fiesta. Una pequeña trampa... así se titula el capítulo.
En el siguiente capítulo sabrás que planes tiene Elisa.
Besotes, amiga
Alguien diría: ¿y por qué ha de ser de frambuesa? jajajaja. La respuesta, igualmente boba, sería: es que la mermelada de frambuesa baja la fiebre. Yo, simplemente, me la zamparía a cuatro carrillos.
ResponderEliminarEn este capítulo el universo ha girado en torno a Nico, que irá a la fiesta finalmente y alguna chaladura se le ocurrirá para alterar a todo bicho viviente, no tengo demasiada confianza en su sentido común... ni en el de Blas. Auguro agitación masiva.
La bruja del pijama de seda (aunque la mona se vista de ídem...) igual se presenta desnuda en medio de las campanadas completamente beoda jajaja ¡qué imagen esa! ¿te lo has planteado? Mmmmmm me temo que no me darás esa alegría...
Feliz Nochevieja!!
Me gusta la 5ª estación.
Un beso
Sí... recuerdo muy bien quien dijo eso y lo alterada que tú estabas... pero, que tú te alteres es muy fácil porque tienes muy poco sentido común.
EliminarEl Universo gira en torno a quien gira.
Puede que algo de agitación haya.
"Desnuda y beoda"... me parece que tanta alegría no te daré...jajaja
Vete a beber unos cuantos tequilas y... cuidado, Nena, detrás de ti he visto al que va vestido de negro, con cara estrecha y cuchillo afilado.
Sí, tienen canciones bonitas.
Un beso
Con unos cuantos tequilas a estas horas de la mañana, me cargo al de la cara estrecha, le hago jirones el traje negro con su propio cuchillo y, enfervorecida, me tomo otros tantos tequilas a su salud.
Eliminar¿Yo poco sentido común? ¡Cuánto me ofendes! Me voy a cerrar los blogs definitivamente.
Besos
jajaja... Hay que tener poco sentido común para venir beoda a la Estación.
EliminarAún conseguirás que yo también me ponga en ese estado.
Y sin tequilas también te lo cargarías, que te conozco.
Que vas a cerrar los tres blogs me lo dices... casi a diario... y ahora querrás decir que la culpa es mía. No, la culpa es tuya que te sulfuras por nada.
Ya puedes dar gracias... que yo soporte la cruz que tengo contigo.
Si vuelves a entrar... pagas todos los platos que he roto en la Estación.
Besos
No tengo dinero, no estoy para pagar vajillas, así que rompe menos o rompe todas las que quieras, pero que el estropicio corra de tu cuenta.
EliminarYo no borracha, no ebria, no beoda o piripi, aunque para el caso da igual sé que no haces gala de buen discernimiento.
Ni gracias ni desgracias Mela, la cruz es recíproca y yo nunca he tenido fuerza bruta para soportar pesos.
Y ahora los cierro seguro, antes de lo previsto, pero sin sulfurarme.
Besos... por no ponerme violenta.
Nena... tú ni tienes dinero ni otras cosas que yo te diría.
EliminarPues yo estoy algo beoda... por tu culpa.
Yo no hago gala de nada, tú eres Doña Perfección.
Ya quisieras tú tener una cruz conmigo. Este verano la vas a tener... que no me vas a ver el pelo.
Cierra lo que te plazca.
Yo ya te veo sulfurada.
Besos... tampoco me quiero poner violenta
Portazo violento.
EliminarMe encantan los portazos violentos
EliminarHola Mela,también tengo sueño,no voy a ir al gimnasio y con mi hermano hace días que no me hablo.Nunca pensé que censuraras mis comentarios,no me ha gustado lo que has hecho.
ResponderEliminarEsta noche te comentaré a las oo:ooh.
Blas es un amor,claro que sí,y Elisa diciéndole que se emborrache.Aunque a lo mejor borracho hubiese dicho por fin quien es la mujer X,creo que es Helena,aunque si es Helena no entiendo muchas cosas porque Natalia dijo en el primer capítulo que la madre de Nico abandonó a Bruno cuando el niño tenía 3 años.Entonces Helena tenía que estar casada con Bruno.No lo sé bonita,ya te explicarás.
Besitos.
Hola Julia... soy la primera que siente haberte censurado comentarios, pero me lo pusiste muy difícil y, creo, que me entiendes.
EliminarRespeto tu opinión, pero este blog lo dirijo yo... lo mejor que puedo.
Tal vez tengas razón y la mujer X sea Helena.
No sé que explicarte, lo que dices es cierto. Y a medida que avance la novela, hallarás las respuestas a tus preguntas.
Besos
Pobre Nicolás, con fiebre y perfectamente guapo y vestido para la fiesta! Por lo menos lo ha podido celebrar.. bueno o no! porque todavía no han llegado .. solo se han subido al coche! Para eso tendremos que esperar la próxima entrega.
ResponderEliminarBesos Mela!!, cada vez estoy mas intrigada...
Hola Laura... bueno, Nico tiene ilusión de ir a la fiesta. Y cuando tienes ilusión... no existe fiebre que te la quite.
EliminarTienes razón, todavía no han llegado.
Me alegra que estés cada vez más intrigada... es buena señal.
Besos
Aix Mela, se me ha hecho muy corto el capítulo !!!!! Ahora tengo que esperarme para ver que pasa en la fiesta !!!!!
ResponderEliminarSeguro que aperece el fiambreeeeeeeeeeeeeeeee jajajjajaja
Muchos besos.
Hola Lidia... si se te hace corto es buena señal ;-)
EliminarPues no sé si el fiambre tendrá muchas ganas de fiesta, pero nunca se sabe...
Muchos besos
Me quedaba relajada con este capítulo pensando, ha sido tranquilo y sin incidentes, pero ¡ay! incauta de mí... Ya nos dejaste con ese final en el cual Elisa parece tener otros planes muy distintos al resto de todos. Solo espero que no tenga intención de aguar la fiesta completa. Bueno, no quiero adelantarme pensando cosas que prefiero dejarme sorprender en cada capítulo.
ResponderEliminarBesosssssss!!!
Hola FG... no tardarás en saber los planes de Elisa.
EliminarBesos
Bueno: Todavía sigo esperando a Helena de Troya vs Elisa. A Patricia le da igual todo y solo se preocupa por si misma. Como siempre un gran capítulo.
ResponderEliminarPD: lo he mirado y en las discusiones entre Nena y tu siempre tienes tu la última palabra
Hola Nuño... ya verás a Helena de Troya en su momento y verás que poco le importa a ella como la llames.
ResponderEliminarPatricia es un poco egoísta, sí.
Me alegra que te haya gustado.
Eso es lógico, estoy en mi blog y si se pone pesada... la censuro.
A ver si es que quieres tener la última palabra tú
Hola Mela, son consejos muy malos los que le da Elisa a Blas. Me parece que Blas va a ser el padre del niño y entonces puede ser que Helena Palacios sea la mujer X. Tengo ganas de ver esa fiesta pero a las 12 cuando cambia el año, mucha gente querrá bailar. No sé si cabrán todos en ese almacén acondicionado.
ResponderEliminarOtra cosa te digo, contigo el Titanic no se hubiese hundido.
Un beso, hada escribiente
Hola Juan... sí, estoy de acuerdo, son malos consejos.
EliminarSobre quién es el padre de Nico y si Helena Palacios es la mujer X... no te puedo decir nada.
La fiesta la verás en el próximo capítulo, el almacén es grande.
Pues fue una lastima que yo no estuviese allí ;-)
Un beso y gracias
Hada escribiente,dentro de un rato se juega la Copa del Rey. ¿No vas a desearle suerte a un servidor del Real Madrid?
EliminarUn beso
Hola Juan... creo que ya están jugando la 2ª parte y por, ahora, están empatando.
EliminarPor supuesto le deseo suerte a tu equipo ;-)
Mi equipo ha perdido,hada escribiente, ¿seguro que le deseaste suerte? Expulsaron a Mourinho y a Cristiano Ronaldo, un desastre.Y Casillas sin jugar.
EliminarLos del BarÇa estaréis contentos.Los del Madrid no tenemos consuelo.
Otra vez será, no te desconsueles por ese motivo.
EliminarTengo que prepararme, me espera una cena.
Que pases bien lo que queda de sábado y domingo
Hola Mela,esa pequeña trampa puede traer consecuencias nefastas.Le podías haber dicho a Julia que no vas a estar a la hora que te piensa comentar. He leído a Nena un poco alterada jajajaja hasta ha amenazado con cerrar sus blogs.
ResponderEliminarAlgo de tequila he bebido,es que os he visto muy beodas a las dos, y no es la mejor solución.Me duele la cabeza y esta noche me va a doler más.
Besos
Hola Merck... bueno, ya veremos lo que pasa con esa pequeña trampa.
EliminarYo podía decir muchas cosas, pero no se me han ocurrido.
Nena se altera por nada, muy parecida a ti. Tú eres otra cruz.
Aquí, nadie ha dicho que beber sea la solución a nada.
Si te duele la cabeza, tómate un analgésico y a dormir.
Besos
A ver si con un poco de suerte Elisita se tira por donde cayó el coche de Salvador...
ResponderEliminarDe verdad, lo que me irrita esta mujer y tu me despistas con el parecido entre Blas y Nico. Normal, ya sabes lo que pienso (no que sea su padre precisamente pero si otro parentesco)
Besos
Hola Silvia... quieres que Elisa se tire por el acantilado, ya comprendo que te irrita ;-)
EliminarYa veremos si se tira o no se tira.
Blas y Nico se parecen muchísimo, pero hay mucha gente que se parece... hasta dicen que todos tenemos un doble.
Besos
Nah, no me líes. Son parientes y por eso se parecen. Mira, ya no se si sacar la camiseta Teodoro's Team o hacerme una que diga Que se tiiiire!
EliminarLa verdad, me está encantando la historia
Besos
Tal vez sean parientes o tal vez, simplemente, se parecen.
EliminarCreo que si tuvieses el libro en tus manos, mirarías el capítulo donde se descubre quién es el padre de Nico. No sé si te podrías aguantar.
Me alegro mucho de que te encante.
Besos
Jajajaja si tuviera el libro entre manos ya me lo habría terminado para no morirme de impaciencia.
EliminarMira, Mela, te diré una cosa: Me gustaría tenerlo entre manos un día. Sinceramente.
Si eso te gustaría... no me parece una cosa difícil de conseguir.
EliminarA lo mejor un día lo tienes entre tus manos y entre tus montones de libros.
Sé que lo cuidarías bien.
Te escribo sólo para decirte que he leído el capítulo, pero no sé qué más decirte XD Lo siento pero hoy he tenido un día muy espeso y de pocas palabras... Pero leerte, te leo ;)
ResponderEliminar.Estelle.
Hola Estelle... siento que hayas tenido un mal día. Ojalá mañana estés mejor.
EliminarYo, hay días, que lo rompería todo. Hay que tener calma.
Besos
No he dicho que haya tenido un mal día, sólo un día poco hablador.
EliminarPues, entonces, me alegro de que no tuvieses un mal día
EliminarVa a contagiar a todo el mundo y la culpa será de la abuela...
ResponderEliminarCuanto más mayores, peor...
Kikas... por favor, no tomes tanto tequila que has llegado derrapando ;-)
EliminarDices que la culpa será de la abuela, o sea, piensas que Emilia Sales es la abuela de Nico. Por lo tanto, piensas que Blas es el padre de Nico.
No lo has dicho... pero sí lo has dicho.
Te ha traicionado el subconsciente
Lo he hecho para obligarte a cambiar el argumento y no darme la razon.....
EliminarRetorcido que es uno....
;-)
Sí, te creo capaz.
EliminarPero no te saldrás con la tuya... si has acertado, has acertado. Ya se verá.
Yo no le cambio ni una coma a la novela... eso lo he dicho muchas veces.
Aunque si has acertado, reconozco que me dará un poquito de rabia darte la razón
Ay, Mela, me quedé preocupada. La fiebre me da mucho miedo y más en los niños. Deshidratación, golpes de calor, convulsiones...
ResponderEliminarCreo que Emilia ha sido una inconsciente, pero ojalá me equivoque. Confío en Blas, él se hará cargo del estado del chiquillo ¿? Eso espero. Un beso
Hola Mere... la verdad es que la fiebre, a veces, sube de un modo escandaloso.
EliminarEmilia ha querido que Nico disfrute de la fiesta, veremos que pasa.
Tú confías mucho en Blas y él te lo agradece ;-)
Un beso
Anda Mela, que sorpresa, muchísimas gracias por publicitar el libro jejejeje, ya de paso te digo que estoy de sorteo en mi blog, por si quieres pasarte a verlo, ya somos 300 seguidores. Un besazo voy a ver si me leo el capítulo de hoy jejeje.
ResponderEliminarHola Tamara... ha sido un placer publicitar tu libro. Escribes de maravilla.
EliminarYo voy a comprarlo y voy a leerlo.
Pasaré a felicitarte, pero me extraña que participe en algún sorteo, ya veremos.
Un besazo
jooo, pobre pequeño, si es que me recuerda a mí, con tanta medicina, y tanto cuidado jejejeje, solo espero que después de la fiesta este recuperado, aunque no debería salir a la calle con fiebre, pero tanta insistencia. Un besazo.
ResponderEliminarPues sí que siento que no estés recuperada todavía. Espero que pronto lo estés, me darás una alegría.
EliminarEs que, a veces, puede más la ilusión que la fiebre.
Yo he salido con fiebre... y no es una gran idea... la fiebre sube más.
Veremos que ocurre con Nico.
Otro besazo te doy
Poco a poco Mela, esto irá con calma jejeje. Un besazo.
EliminarPues sí... poco a poco, claro que sí.
EliminarUn besazo
Bueno parece que el chaval se va a salir con la suya, claro es que celebrar el dia de Nochevieja nadie se lo quiere perder y a Nico parece que le hace mucha ilusion. Esperemos que la gripe no pase a mayores aunque a veces cumplir un sueño puede hacerte mejorar, al menos de momento ejjeje
ResponderEliminarcuales seran los planes de Elisa? uhmmmmmmm veremos.
bonito capitulo Mela.
unos besotesssssssssssssssssssssssss
Hola SC... sí, a Nico le hace mucha ilusión.
EliminarEstoy de acuerdo, cumplir un sueño... siempre te puede mejorar.
Los planes de Elisa los conocerás muy pronto.
Me alegra que te haya gustado.
Unos besotes
Bueno, quería darte las gracias por seguir mi blog, por desgracia aún no he podido leer el tuyo pero en cuanto antes voy a ponerme con el capítulo 1, un beso :)
ResponderEliminarHola Maria Magdalena... he visto que me seguías y he ido a conocerte.
EliminarMe ha parecido que tienes un buen blog y allí me tienes.
Te haré comentarios siempre que pueda.
Será un placer tener una nueva lectora y conocer tu opinión.
Pero tómate el tiempo que necesites, no hay prisa alguna.
Un beso
Muy bueno Mela como siempre. Me he quedado con la ganas de ese plan que se trae Elisa. Pobre Nico ojalá pueda divertirse. Creo que Blas trae mucho a su espalda, es difícil. Has creado una maravillosa historia no sé si ya te lo he dicho. Un beso enorme.
ResponderEliminarHola Lou... me alegra que te haya gustado.
EliminarEl próximo capítulo sabrás sobre el plan de Elisa y sobre si Nico se divierte.
Bueno, Blas tiene algún problema que no es matemático ;-)
Tú siempre me dices cosas agradables y yo te lo agradezco.
Un beso enorme
Hola preciosa!!
ResponderEliminarQue tiernooo... me ha gustado mucho el capitulo de hoy, no porque Nico esté enfermo...(eso nunca), por la ternura que trasmiten hacia él.
Besos
Hola Susana... me alegra mucho que te haya gustado.
EliminarA mí me ha gustado verte.
Besos
Por fin parece que hay algo más de tranquilidad y puede que toods se diviertan en la fiesta a pesar de la fiebre de Nico, a ver si nos dan un respiro
ResponderEliminarBesos Raquel
http://raqueljimenezbisuteria.blogspot.com.es/
Hola Raquel... has cambiado de imagen, me gusta.
EliminarA ver si es cierto y respiramos un poco ;-)
Besos
Ay este Nicooooo miente y miente,caprichosito es! y Elisa,que planes tiene? es que ya me da miedo esa mujer!Se divertirán en la fiesta o pasará alguna cosa? mmmmmmm que intriga! un abrazo Mela y que tengas un bonito día!
ResponderEliminarHola Hada Isol... Nico quiere ir a la fiesta por encima de todo.
EliminarYa veremos que planes tiene Elisa.
Creo que ambas cosas... se divertirán y algo pasará ;-)
Otro abrazo para ti y también te deseo un buen día!
Aunque sería mejor que se quedara en casa, en fin... medio grado de temperatura tampoco es tanta diferencia...
ResponderEliminar¡Ojalá lo pasen todos bien! si no estropea alguien la fiesta, claro.
Me iba a ir ya pero ahora tengo que saber qué va a pasar, hasta ahora Mela!
jajaja... Pues nada, a averiguar qué ocurre en la fiesta
Eliminar