CAPÍTULO 120
FRENTE A MIKAELA, FRENTE A HELENA
E
|
l señor Teodoro y la señora Sales llegaron a casa
cuando aún no eran las ocho; Nicolás y Marcos habían estado en la habitación de
los juegos hasta que planearon salir al jardín a jugar a fútbol. A ninguno le
importó que el terrible vendaval helado sacudiera sus cuerpos sin contemplaciones
y casi les resultara imposible dominar la pelota. Todo lo contrario, estaban
encantados y disfrutando de lo lindo. La señora Sales se horrorizó al ver a su
nieto con una simple camiseta mientras era zarandeado por el huracán.
Nicolás también se horrorizó cuando vio a su padre y
a su abuela, se le había pasado el tiempo sin darse cuenta. Tras despedirse
precipitadamente de Marcos, corrió veloz hacia casa y se metió de cabeza en
el despacho para terminar unos deberes que había dejado olvidados hacía un buen
rato.
El señor Teodoro ayudó a su madre a entrar al
vestíbulo puesto que el embravecido viento no la hubiese dejado avanzar ni un
paso. La mujer recriminó a Matías haber permitido que los niños jugasen en el
jardín con semejante ciclón.
—Es muy complicado que el señorito Nicolás obedezca una orden mía —dijo como excusa el señor Hernández, crispando todavía más a la señora
Sales.
El señor Teodoro se enfadó y riñó a su hijo por
estar jugando cuando no había acabado con sus deberes.
No obstante, se quedó a su lado y colaboró con él para terminar la tarea. Cuando el chiquillo estaba guardando los libros en la mochila, su padre lo sorprendió con una pregunta.
No obstante, se quedó a su lado y colaboró con él para terminar la tarea. Cuando el chiquillo estaba guardando los libros en la mochila, su padre lo sorprendió con una pregunta.
—¿A qué profesor prefieres del instituto?
—A Mikaela Melero —respondió el niño casi sin pensar. Fue
evidente que lo tenía muy claro—. ¿Por qué me lo preguntas?
—Una curiosidad, nada más.
—Y el que menos me gusta es el señor Cuesta —manifestó Nicolás con ardor—. ¿No podrías despedirlo?
—Espero que respetes a ese hombre y te portes muy bien en sus clases —repuso su padre.
Hubiese querido contarle que Mikaela era Helena, que Mikaela era su madre... pero debía esperar. Si él no sabía cómo iba a controlarse, creía imposible que Nicolás lo consiguiera.
Esperaría solo hasta el viernes. En cuanto Arturo Corona y Jaime Palacios abandonasen el instituto llegaría el momento en el que Helena dejara de ser Mikaela.
Hubiese querido contarle que Mikaela era Helena, que Mikaela era su madre... pero debía esperar. Si él no sabía cómo iba a controlarse, creía imposible que Nicolás lo consiguiera.
Esperaría solo hasta el viernes. En cuanto Arturo Corona y Jaime Palacios abandonasen el instituto llegaría el momento en el que Helena dejara de ser Mikaela.
Durante la cena, y después en el salón, el señor Teodoro estuvo muy silencioso. Tenía mucho que pensar y estaba deseando retirarse a su habitación para meditar con tranquilidad.
En consecuencia, cuando llegó la hora de dormir se arrebujó, satisfecho, en la cama.
Intuía que no iba a pasar una buena noche y que conciliar el sueño iba a ser difícil. A pesar de ello se sentía a gusto cubierto con el edredón.
No había visto a Elisa en el funeral de Tobías; sí
vio a la señora Estela y al señor Francisco. Y ambos coincidieron en
preguntarle por Nicolás.
—Está perfectamente —sonrió el señor Teodoro, orgulloso—, haciendo de las suyas. Me vuelve loco.
—¡No somos nadie! —exclamó el señor Francisco con pesar— Hoy estamos aquí y mañana quién sabe... ¡Pobre Tobías! Lo echaremos de
menos en el pueblo, era un buen hombre y un buen policía.
—La vida es así de injusta y no vamos a poder cambiarla, hay que tirar
para delante —declaró Estela.
—¿Está bien Gabriela? —se interesó el señor Teodoro, cortésmente.
—Sí, está bien, pero muy ocupada. Ha sentido no poder venir. Elisa
tampoco ha venido, ¿está bien ella?
—Supongo que sí —medió Emilia Sales—. La verdad es que últimamente la vemos y hablamos poco.
Esa era una verdad a medias porque lo cierto es
que no habían visto a Elisa ni hablado con ella desde su llegada a Aránzazu, y
el señor Teodoro no conseguía entender el motivo de tanto distanciamiento. Debería presentarse en su casa y verla a
toda costa. También debía meditar sobre la muerte de Tobías. ¿Qué querría decirle? ¿Tendría alguna
relación con el extraño asesinato de Víctor Márquez? Sea como fuere, ya no
podía saberlo.
Y su mente estaba enloquecida por apartarlo todo y
solo pensar en Helena Palacios. No había sabido nada de ella durante doce
largos e interminables años, y ahora la tenía muy cerca sin haberlo
sospechado. O sí lo había sospechado pero llegó a creer que estaba necesitado, obsesionado y loco. Debajo de la máscara de Mikaela Melero se escondía la mujer que
había amado con toda su alma y que era la madre de su único hijo, Helena
Palacios.
El señor Teodoro miró el despertador depositado en
su mesilla. Las agujas, perezosas, se movían lentamente, se negaban a correr y
las horas tardaban en pasar. Y él se desesperaba dando vueltas en la cama, deshaciendo las
sábanas, frenético por que amaneciera, abrasado en deseos de ver a Mikaela
Melero.
Y como todo deseo lógico se cumplió... Amaneció, y
cuando terminaba de quedarse dormido, el despertador empezó a alborotar la paz
de la habitación. Mas era tan profundo el pozo donde se hallaba el
subconsciente del señor Teodoro que no oyó el timbre del reloj y fue su hijo
quien lo zarandeó, extrañado, de su resistencia a despertar.
—¡Papá, papá! —le llamó— ¡Es hora de levantarse! ¡Se te han pegado las sábanas!
El señor Teodoro abrió los ojos, soñoliento y
confuso. Tardó unos segundos en ser consciente de la realidad y, entonces, se
levantó de un salto.
La señora Sales se percató de la abstracción de su
hijo durante el desayuno viéndole muy callado y concentrado en sus pensamientos.
—¿Has dormido mal, Blas? —le preguntó— Estás muy ojeroso.
El joven continuó en su aislamiento sin enterarse de
que su madre le hablaba.
—¡Papá, la yaya te ha hecho una pregunta! —exclamó Nicolás, dándole un codazo.
El golpe provocó que se derramara parte de la leche
que estaba tomando e, inmediatamente, propinó un cachete al niño.
—¡Estate quieto!, ¿vale? —le increpó, molesto.
—Blas, pareces estar en otro planeta —dijo la señora Sales—. Estamos en la Tierra, ¿lo recuerdas? ¿Estás
bien, hijo?
—¡Mamá, lo siento! —se disculpó el señor Teodoro— ¡Claro que estoy bien, solo estoy pensando! Tengo bastantes cosas en
qué pensar, eso es todo.
Durante el trayecto de casa al instituto, Nicolás tuvo muy claro que su padre no estaba comunicativo y que tenía mucha prisa por llegar al centro ya que condujo a mayor velocidad que otras mañanas e incluso adelantó a diversos vehículos. El chiquillo miró la hora en su reloj.
—No hace falta que corras tanto —comentó a continuación—, no es tarde.
Después del comentario de su hijo, el señor Teodoro
aminoró la marcha.
Debía calmarse, el instituto no estaba huyendo de él por mucho que así lo creyera.
Debía calmarse, el instituto no estaba huyendo de él por mucho que así lo creyera.
Todavía no era de día, clareaba, y el
viento había cesado por completo. Llegaron a “Llave de Honor”
con media hora de antelación al inicio de las clases. Los señores Amadeo Ortiz
y Eduardo Cardo les salieron al paso.
—Buenos días, don Blas, buenos días Nicolás —saludó el señor Ortiz sonriendo, ampliamente, hecho que iba en contra
de la estética—. ¡Espero que no vuelvas a tener la idea de volar
por las ventanas! —añadió mirando al chiquillo.
—¡Señor Teodoro! —exclamó Eduardo Cardo con tono urgente— ¡Debo recordarle que es miércoles! ¡Ruego al Cielo que no haya
olvidado que el viernes tenemos visitas muy importantes! ¡Pasado mañana!
—No he olvidado nada, tranquilícese. Mañana dedicaremos el día a ensayar.
—¿Únicamente mañana?
—Únicamente mañana, será suficiente.
El jefe de estudios no estaba en absoluto de acuerdo
pero no se atrevió a discutir con el director. Mucho menos, notando en él, una
impaciencia y excitación no acostumbradas.
El señor Teodoro miraba a su alrededor como si
estuviera buscando algo o a alguien.
—¿Han llegado la señora Paula y su ayudante, Mikaela? —interrogó sin poder contenerse.
—¡Vaya! Usted las nombra y en este momento están entrando por la puerta —respondió el señor Ortiz.
El joven director se giró de inmediato y miró a Mikaela
Melero como si la viera por vez primera. Mientras su corazón galopaba
salvajemente examinó hasta el más insignificante detalle de su rostro.
La rubia profesora captó al instante el estudio minucioso al que la estaba
sometiendo el señor Teodoro y se sintió invadida por una extraña sensación.
—Buenos días —dijo Paula Morales, un tanto angustiada. O el señor Teodoro comenzaba a disimular
desde ya o Helena Palacios iba a darse cuenta de que había sido descubierta.
—Buenos días —saludó Nicolás a quien no se le había escapado
la rara conducta de su padre—. ¡Papá!, ¿qué te pasa? ¿Por qué miras tanto a
Mikaela?
La pregunta del chiquillo hizo reaccionar al señor
Teodoro y tomar conciencia de la situación. Dejó de mirar a la mujer y miró a
su hijo.
—Nico, recuerda que tú y Nat estáis castigados hoy y el resto de la
semana. Miraba a Mikaela porque quería pedirle que se hiciera cargo de vosotros
a la hora del recreo. ¿Está conforme? —preguntó mirando de nuevo a la profesora. Pero esta vez la miró
dominando todos sus impulsos.
La aludida asintió recobrando la tranquilidad. Por
un momento había llegado a pensar que Blas Teodoro estaba viendo a través de su
máscara y la estaba reconociendo.
Nicolás salió al patio para aguardar la llegada de
Natalia y Bibiana.
El señor Teodoro se quedó en el hall departiendo con los profesores que iban entrando. Pero su atención la
acaparaba, más de lo debido, Mikaela Melero. No podía evitar
buscarla con la mirada intentando, por todos los medios, que la mujer no le
pillara. Y sus intentos fueron fructíferos porque solamente Paula
Morales fue testigo del seguimiento del hombre hacia su amiga.
La prueba de fuego había comenzado y el señor Teodoro ya se estaba quemando, ya sufría el calor de las llamas.
Y ardía por hablar con Paula Morales. Necesitaba preguntarle cuál fue la reacción de Helena cuando él se desmayó en el patio. Necesitaba conocer la respuesta a pesar de temerla.
Y de pronto, su voz escapó de su garganta, alta y clara.
—Señora Morales, haga el favor de acompañarme a mi despacho. Quiero hablar con usted sobre mi hijo.
Todos los presentes le miraron, y la aludida se sobresaltó dado que sospechaba que el director no pretendía hablarle sobre Nicolás.
—Señor Teodoro —intervino el jefe de estudios—, como hombre cabal que es debería entender la importancia de la visita del viernes y...
Esta intervención fue muy inoportuna; Blas Teodoro estaba demasiado alterado y su respuesta lo demostró.
—¡SEÑOR CARDO! ¿Quién le ha dicho a usted que yo sea un hombre cabal? ¡NO LO SOY! ¡Tengo muy poco de cabal y bastante de desquiciado!
Un silencio mortal siguió a las palabras del director, un silencio que volvió a la vida por la risa que Helena Palacios no logró acallar. Y esa risa de Helena enardeció más a Blas.
—¿Le parece gracioso lo que he dicho, señorita Mikaela? —interpeló devorándola con la mirada— Me alegro, es un acontecimiento extraordinario verla reír.
—Se equivoca usted —respondió Helena apagando su risa—. No sé lo que usted ha dicho, no le estaba prestando atención. He recordado algo que me ha hecho reír sin más.
Blas Teodoro asintió con violenta energía.
—Vuelvo a alegrarme. Me alegro de que tenga recuerdos que la hagan reír. Yo también tengo recuerdos que me hacen reír. Mejor tener recuerdos gratos que ingratos, ¿no lo cree así?
—Pues lo cierto es que el recuerdo que a mí me ha hecho reír ha sido ingrato.
Y ambos se miraron desafiantes olvidando dónde estaban, no recordando que había gente a su alrededor.
Semejantes a dos torres altas y poderosas que se contemplan y observan sin opción a acercarse ni a alejarse. Las dos torres saben que, de moverse, pueden caer y romperse porque irremediablemente arrancarían unos cimientos muy arraigados.
La prueba de fuego había comenzado y el señor Teodoro ya se estaba quemando, ya sufría el calor de las llamas.
Y ardía por hablar con Paula Morales. Necesitaba preguntarle cuál fue la reacción de Helena cuando él se desmayó en el patio. Necesitaba conocer la respuesta a pesar de temerla.
Y de pronto, su voz escapó de su garganta, alta y clara.
—Señora Morales, haga el favor de acompañarme a mi despacho. Quiero hablar con usted sobre mi hijo.
Todos los presentes le miraron, y la aludida se sobresaltó dado que sospechaba que el director no pretendía hablarle sobre Nicolás.
—Señor Teodoro —intervino el jefe de estudios—, como hombre cabal que es debería entender la importancia de la visita del viernes y...
Esta intervención fue muy inoportuna; Blas Teodoro estaba demasiado alterado y su respuesta lo demostró.
—¡SEÑOR CARDO! ¿Quién le ha dicho a usted que yo sea un hombre cabal? ¡NO LO SOY! ¡Tengo muy poco de cabal y bastante de desquiciado!
Un silencio mortal siguió a las palabras del director, un silencio que volvió a la vida por la risa que Helena Palacios no logró acallar. Y esa risa de Helena enardeció más a Blas.
—¿Le parece gracioso lo que he dicho, señorita Mikaela? —interpeló devorándola con la mirada— Me alegro, es un acontecimiento extraordinario verla reír.
—Se equivoca usted —respondió Helena apagando su risa—. No sé lo que usted ha dicho, no le estaba prestando atención. He recordado algo que me ha hecho reír sin más.
Blas Teodoro asintió con violenta energía.
—Vuelvo a alegrarme. Me alegro de que tenga recuerdos que la hagan reír. Yo también tengo recuerdos que me hacen reír. Mejor tener recuerdos gratos que ingratos, ¿no lo cree así?
—Pues lo cierto es que el recuerdo que a mí me ha hecho reír ha sido ingrato.
Y ambos se miraron desafiantes olvidando dónde estaban, no recordando que había gente a su alrededor.
Semejantes a dos torres altas y poderosas que se contemplan y observan sin opción a acercarse ni a alejarse. Las dos torres saben que, de moverse, pueden caer y romperse porque irremediablemente arrancarían unos cimientos muy arraigados.
Págs. 948-955
Hoy dejo una canción de Malú y Revólver... "El peligro"
Próxima publicación... jueves, 12 de novienbre
Mela, cariño mío, ay qué capítulo!!!! Ay qué gracia!!!! Blas dice que está desquiciado y es verdad se ha desquiciado. Ay que hombre!!! Y Helena??? Ay dice que se ha reído por un recuerdo ingrato. Chapó, Mela, chapó!!!!
ResponderEliminarAy, cariño, muchas de mis amigas quieren que Blas y Helena acaben separados, mi madre también. Ay, yo de ninguna manera. Quiero que acaben juntos!!! Ay qué pareja!!! La canción es preciosa, qué romántica eres bonita mía!!! No sé qué pasará el viernes. Ay qué interesante está!!!! Ay, no sé si Blas podrá aguantar hasta el viernes, falta poco pero los hombres se vuelven locos. Y Blas se ha vuelto loco. Ay qué gracia de hombre!!!
Besitos!!!!
Mela, cariño qué te pasa que no contestas??' Mi madre te manda muchos cariños. Han criticado a Helena y a Blas en el gimnasio. Ay qué revuelo con el capítulo!!!!
EliminarBesitos!!!
Hola Julia... Bueno, Blas está un poco nervioso... o bastante... ha dicho que está desquiciado, pero eso no significa que lo esté realmente
EliminarHelena ha mentido... ella se ha reído al oír lo que decía Blas ;-)
Me alegra que te haya gustado el capítulo, imaginaba que te gustaría ;-)
Pues, a lo mejor, tus amigas y tu madre se quedan muy contentas y satisfechas cuando se acabe esta historia... o, a lo mejor, eres tú quien se queda contenta y satisfecha ;-)
Me alegra que te haya gustado la canción
Lo único que puedo decirte es que el viernes será un día que nunca olvidarán los protagonistas de esta novela
Ya veremos si Blas aguanta hasta el viernes ;-)
No he podido contestar antes porque he tenido una mañana ocupada
Dale dos besos a tu madre de mi parte
Bueno, pues si los han criticado... ellos están tan tranquilos en Aránzazu
¡Besitos!
Mela, cariño mío!!! Tienes que saber lo que dicen la mayoría de mis amigas, como eres tan romántica dicen que Blas y Helena acaban juntos seguro. Que tú vas a hacer que acaben juntos. Ay qué gracia!!! Yo quiero que acaben juntos, quiero una escena de amor entre ellos, pero que Helena no se lo ponga fácil. Ay, me encanta ver a Blas desquiciado!!!!
EliminarBesitos, bonita mía!!!!
Julia, pues casi no sé qué decirte
EliminarSoy yo quien escribe esta novela... entonces está claro que seré yo quien haga que Blas y Helena acaben juntos o separados
Tus amigas creen que van a acabar juntos... pues muy bien... ya se verá
jajaja... Me parece que eres un poquito malvada ;-)
Pero, tranquila, puedo asegurarte que Helena no se lo pondrá fácil ;-)
¡Besitos!
Mela, bonita mía!!! Me encanta la decoración que le has puesto al puntero, a mi madre también y te manda cariños. A mis amigas no les gusta mucho.
EliminarBesitos!!!!!
Me alegra que a tu madre y a ti os guste
EliminarSi a tus amigas no les gusta... abajo, al final del blog, está el remedio para lo que tanto les desagrada,,, se llama cursor switch... si clican ahí, adiós al problema
JOJOJOJOJOJOJOJO NO SE ACLARAN JOJOJOJO VIENE EL CAOS,LOS CIMIENTOSS DEL INSTITUTO LOS ARRANCAN Y EL VIERNES NO AY INSTUTUTI JOJOJOJOJOJ,HELENA NO SE ACLARA BLAS TAMPOCO EHHH SON TAL PARA CUAL,ELLA ES DE ARMASTOAMAR Y BLAS UN COCES JOJOJOJOJOJ NO SE ACLARAN,ME A GUSTAO PORQUEE SE VE EHHH QUE SON TAL PARA CUAL Y QUIEN SE META SALE PAGADO,HELENA ES MUY GUAPA Y MUY SIMPATICA ELLA DICE QUE NO PERO ES SIMPATICA ES DE ARMAS TOMAR Y BLAS UN TANQUE,ME A GUSTAO,ME A GUSTAO,
ResponderEliminarSALUDOS MIOS GUAPA,
Hola Carlos... Es muy posible que Blas y Helena no se aclaren
EliminarPero tú tampoco te aclaras nada bien cuando escribes un comentario
Saludos
HOLA MELA SIME ACLARO SI NO DIGAS QUE NO ME ACLARO QUE SI MEACLARO,SE ESTA HISTORIIA MEJOR QUE NADIE,AORA BLAS LE PREGUNTA A LA CHISME DE PAULA DEQUE RECUERDO SE RIE HELENA,AORA QUIERE SABERLO Y LA CHISMES QUE ES PAULA QUE LE CUENTE DE QUE RECUERDO SE RIE HELENA,
EliminarSALUDOS MIOS,
Para conocer tanto esta historia... la estás contando muy mal
EliminarBlas, en ningún momento, le va a preguntar a Paula de qué recuerdo se reía Helena... Blas sabe muy bien que Helena se ha reído por lo que él ha dicho
HOLA MELA PUBLICAS UNA VEZ CADA MES DICES QUE TIENES COSAA HACER TE ENTRETIENES PONIENDO MUÑEQUITOS A LA FLECHA SISIS ASI TE ENTRETIENES,NO QUIERO SABER DE NADIE ME CAE GORDOS TODOS ME CAEN MAL NO ME TRAGO A ANDIE,
EliminarSALUDOS MUOS,
Seguramente es que tú no debes saber que el día 31 de este mes es Halloween
EliminarDe todos modos, yo me entretengo en lo que me da la gana entretenerme
No creo que tú me estés pagando un sueldo para exigirme algo... y aunque me lo pagaras... yo no admito exigencias
HOLA MELA DESEO BUENAS SEMANA A HELENA
EliminarSALUDO MÍO
Muy bien
EliminarHOLA MELA TOCA CAPITULO ESTE JUEVES,
EliminarSALUDOS MIOS,
Lo sé
EliminarBueno pues un interesante capitulo el de hoy donde vemos a un señor Teodoro casi fuera de sí ante la inminencia de hablar con Mikalea y decirle que lo sabe todo y la de esta que parece que está adivinando que él sabe más de la cuenta y parece reirse de él.
ResponderEliminarAunque no se por que me da que va a ser una relación más tormentosa aún al menos al principio.
Ya veremos lo de los preparativos para la visita si no tienen alguna historia ajjaja menuda fiera se puso el director.
Me gusta la cación de REvolver.
unos besotesssssssssss cuidate mucho
Hola SC... Sí, es cierto que Blas Teodoro está un poco fuera de sí ;-)
EliminarHelena se ha puesto nerviosa al principio, cuando llega al instituto y nota que Blas la mira demasiado... pero luego se ha reído porque no se ha podido contener después de oír lo que Blas ha dicho... pero ella en este capítulo no es consciente de que su Blas ya sabe quién es
Bueno, pues ya veremos si la relación es tormentosa ;-)
El viernes está muy cerca... y desde luego a Blas parece importarle muy poco... ya veremos lo que ocurre
Me alegra que te guste... a mí también ;-)
Me cuidaré... cuídate tú también
¡Unos besotes!
De verdad que yo juraría que no he escrito "su Blas" ;-)
EliminarPero aquí quién no es cobarde por amorrrrr????? jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa Claroooo, cuando alguien se enamora debe pasarse la vida corriendo, corriendo y corriendo. Tiene que esconderse, el amor es peligroso!!!!! Cuidado!!!!! Que nadie se enamore!!!!! Me ha pasado como a Blas, me he desquiciado. He soltado todos los botes y los chalecos salvavidas. Como hundas el barco Mela, Todo el mundo a nadarrrrr!!!!! :)))))))))))))))))))))))))))))))))))))
ResponderEliminarHola Merck... Pues yo no sé ni quién es cobarde ni quién es valiente... no me pongas nerviosa
EliminarMi intención no es hundir el barco... mi intención es llevarlo a buen puerto y es lo que haré
Besos
Noticia, notición del día de hoy!!!!!!! Los fabricantes de tila están con Blas, los fabricantes de café están con Helena!!!! Los coleccionistas están como yo, tomamos sorbos de tila y sorbos de café. Los coleccionistas quieren saber, ¿qué prefiere tomar la autora de la novela???? Tila o café???
Eliminarjajaja... Creo que es lógico que unos apuesten por el café... y otros, por la tila...según sus intereses
EliminarPues yo voy a hacer como tú y como los coleccionistas... no me voy a mojar ;-)
Dependiendo del momento, tomo café o tomo tila ;-)
Hoy has salido, ¿verdad Mela? ¡¡¡¡Hoy te has mojado seguro!!!!! :)))))))))))))))))))))))))))))))))))))))))))))))))
EliminarUn besazo!!!!!!!!
Pues sí, me he mojado... pero no me he mojado con tila o con café... me he mojado porque llovía
Eliminar¡Un besazo!
¡¡Hola Melita!! Pues no, el disimulo no es una de las "virtudes" de Blas, qué hombre tan neurótico, por Dios... estando ahora en ventaja, se "manifiesta" demasiado. Le perdono en honor a su ansiedad amorosa (y no digas que no necesita de mi perdón que me da igual, yo se lo otorgo)
ResponderEliminarPor otro lado, están esos flecos de la muerte del señor Tobías... Digo flecos porque, para mi, muerte natural no ha sido, habrá que ver qué le sucedió en realidad, quién le hizo desaparecer del mapa y quién lo mandó hacer desaparecer, porque en esta historia hay, por lo menos, una mano oscura o una sombra muy alargada manejando los hilos.
Eso de que correr es de cobardes, no sé yo, no estoy de acuerdo (en según qué casos) por razones obvias jajajaja. Y sí, quien alguna vez no haya sido cobarde por amor, poco ha amado.
Vamos a ver qué pasa con esas dos torres enfrentadas, de cimientos tan profundos. ¿Corrimiento de tierra? ¿seismo? ¿una gran falla en el terreno? ¿me repito?
Muy buen capítulo, la cosa se pone candente.
Besossssss
¡¡Hola Nenita!! Hoy estamos muy cariñosas las dos
EliminarLo que sucede es que Blas estaba muy nervioso... y es normal que estuviera nervioso
Yo no te iba a decir nada, otorga lo que quieras ;-)
Sí, entiendo que sospeches que detrás de la muerte de Tobías hay algo extraño... y es posible que estés en lo cierto ;-)
Sí, yo creo que está claro que hay una mano oscura o sombra muy alargada
Me gusta y estoy de acuerdo en que quien alguna vez no haya sido cobarde por amor, poco ha amado
Pero "(en según qué casos) por razones obvias y jajaja"... no entiendo nada... no te explicas bien
jajaja... Pues no sé debido a qué será... pero las torres se moverán... a lo mejor te meto en la novela a ti para que las empujes... jajaja
Es un honor que me digas eso... sé que eres bastante exigente... quizás demasiado ;-)
¡¡Besos!!
¿Dónde no me he explicado? Pues si no lo he hecho es porque suponía que lo obvio es obvio... es decir, si veo venir un piano sobre mi cabeza y no corro, no es que sea cobarde o no, ¡qué insignificancia!, es que soy estúpida. Grrrrrrr
EliminarY mientras tú supones lo que quieras suponer... yo tengo que entender que te referías a un piano
EliminarPor supuesto que es lógico y muy recomendable que te apartes o corras si ves que un piano va a aterrizar sobre tu cabeza... jajaja
Lo que no acabo de entender es como verías llegar al piano... quiero decir que, generalmente, la gente camina mirando hacia delante
Bueno, puede existir alguna excepción... es posible que tú camines mirando hacia arriba...y, sí, haces bien, porque es muy normal que lluevan pianos... jajaja
Estás saturada, Mela, con el "su", la mano oscura, la sombra alargada y la boca-túnel llena de dientes ya no das para más. Quien dice piano dice granizo del tamaño de pelotas de baloncesto.. era una ironía XDXDXDXDXD
EliminarPues mira lo que te digo... tu mano oscura, tu sombra alargada y tu boca-túnel llena de dientes son los sospechosos de ese "su" que yo no he escrito
EliminarAunque, pensando un poco, ese "su" no es nada malo... seguramente lo he escrito yo sin darme cuenta, y es una buena señal que no te pienso explicar
Veremos...
EliminarAlgún paisaje ;-)
EliminarEl apuesto señor Blas está empezando a tener serios problemas de conducta... Parece exagerado que una persona te pueda volver tan loco, pero no es tan extraño. A este paso, dudo mucho que aguante hasta el viernes de la visita. Creo que va a explotar mucho antes XD
ResponderEliminar.Estelle.
Hola Estelle... Sí, estoy convencida de que todas las personas que estaban presentes en el hall del instituto opinan igual que tú... bueno, todas no, Helena estaba allí ;-)
EliminarSeguramente a mucha gente le parecerá exagerado... y poca gente lo entenderá muy bien y no lo verá nada extraño
Bueno, pues ya veremos si aguanta hasta el viernes o explota antes ;-)
Besos
Hola Mela, este capítulo me ha gustado desde la primera palabra hasta la última y hubiese querido mucho más.
ResponderEliminarExtraordinario, hada escribiente. La canción, preciosa.
Mikaela es la profesora que más le gusta a Nico, me gustará ver su reacción cuando se entere de quién es Mikaela.
Blas se está quemando con la prueba de fuego, estoy deseando ver cómo pasa la prueba Helena. Hay algo en ella que se me escapa y que me intriga mucho. Tengo una pregunta, ¿estaba el señor Cuesta en el hall?
Un beso.
Hola Juan... Pues me alegra que te haya gustado desde la primera hasta la última ;-)
EliminarSí, la canción es muy bonita
Sí, Blas se lo ha preguntado y Nico lo ha dicho... Pues te puedo asegurar que Nico se enterará, de su reacción ya no te puedo decir nada ;-)
Bueno, Blas está nervioso y bastante alterado... creo que es lógico
Tus deseos se harán realidad... ya lo verás ;-)
Supongo que lo que se te escapa y te intriga lo acabarás descubriendo a medida que la historia avance
No, no estaba... Ismael Cuesta no ha oído ni visto lo que ha sucedido
Un beso
El Señor Teodoro pierde los nervios?? jejeje yo siempre le vi muy cabal, será que los recuerdos nos desquician a veces o será que no, quien sabe. Un besazo.
ResponderEliminarHola Tamara... El señor Teodoro pierde los nervios como tú y como yo ;-)
EliminarTodos somos muy cabales hasta que dejamos de serlo ;-)
La verdad es que Blas no se ha desquiciado por ningún recuerdo... está muy alterado porque tiene muy cerca a la mujer de la que está enamorado
Hacía muchos años que no la veía... y ella está disfrazada
Un besazo
Tengo por experiencia que debe lucharse por amor, tal vez debería intentarlo ahora.
EliminarUna buena lucha y, tal vez, una buena experiencia
EliminarYo creo que Blas lo intentará
¡Pobre Nico! Tiene unos padres muy sensatos.
ResponderEliminarPilar.
Hola Pilar... Entiendo que lo que quieres decir es que tiene unos padres muy insensatos
EliminarMuy bien... es tu opinión
Pero sí te puedo decir que a veces las circunstancias no nos permiten tener sensatez
Besos
Hola Mela, me he deleitado con la cadena de caras sorprendidas de la señora Sales, Nico y Blas ante el viento huracanado y el niño ha estado jugando a la intemperie en camiseta. Cuantas veces pasa, que cambian las circunstancias y nos coge de improviso. Blas le manda a estudiar y sin embargo le ayuda, esa dualidad es puro cariño. Y pobre Blas, qué noche más larga. La impotencia de la espera, la oscuridad que da rienda suelta a nuestros temores... Lo retratas maravillosamente.
ResponderEliminarLas prisas por llegar al instituto, la pregunta a Nico... No deja de pensar en Helena. La busca y cuando la ve, la mira con insistencia. La tensión está en el aire, nos metes en su misma piel. El viernes hay visita, Don Cardo ¡qué machacón! Hoy no es un hombre caval y lo grita a los cuatro vientos ;) Me encanta este Blas tan vulnerable. Micaela juega con él, con ella es como un chiquillo :) Dos torres frente a frente sin acercarse ni alejarse... Una metáfora preciosa, rebosa poesía e invita al romance 💙☔🌈☀❤
Enhorabuena, un capítulo memorable. Sabes amar, Mela, no me cabe la menor duda.
Un beso
Hola Mere... La verdad es que Nico y Marcos estaban disfrutando a pesar del viento... y, bueno, la señora Sales se ha horrorizado ;-)
EliminarSí, el cambio de circunstancias nos puede coger de improviso
Sí, Blas le ayuda a terminar los deberes... y es cierto que hay mucho cariño entre ellos
La verdad es que sí ha sido una noche larga para Blas... estaba muy impaciente
Son doce años sin verla... doce años muy largos, muy difíciles... volverla a ver, aunque ella esté disfrazada, es un momento muy complicado... hay que intentar ponerse en su lugar
jajaja... Don Cardo está muy nervioso por la visita del viernes, quiere que todo salga bien... y teme que todo va a ser un desastre
Cuando Blas grita a los cuatro vientos ;-) que no es un hombre cabal es una reacción muy comprensible aunque no lo parezca... él está deseando saber cuál fue la reacción de Helena cuando él se desmayó... quiere hablar con Paula para preguntárselo... y el señor Eduardo Cardo lo ha alterado mucho
Pues me alegra que te encante este Blas tan vulnerable ;-)
La actitud de Blas ya no puede ser la misma... ha encontrado a quien tanto deseaba encontrar
Mikaela no ha querido admitir que se ha reído por lo que él ha dicho... pero te aseguro que no juega con él, ella no lo ve como a un chiquillo... ya verás como no
Pues la verdad es que me encantó escribir lo de las torres... me alegra que te haya gustado la metáfora
Muchas gracias, Mere... Fue un placer escribir este capítulo
Sé muy bien lo que se siente cuando se ama... eso te lo aseguro... saber amar ya me parece algo bastante más complicado
Dos placeres... uno, recibir tu visita... y dos, leer tu comentario
Un beso
Conocer los entresijos me ha ayudado a ponerme completamente en situación y ahora comprendo mejor la reacción de Helena. Lo atribuía a las ganas de coquetear, los veo tan risueños... Es que hacen una pareja monísima ;)
EliminarHelena no ha podido contener su risa al oír a Blas decir semejantes desatinos... pero luego no ha querido admitir que se riera por eso... y ha inventado que estaba recordando algo
EliminarNo verás a Helena coquetear en toda la novela... me parece que no sabe ;-)
Sí, yo también creo que hacen una pareja monísima ;-)
Hola Mela!!!
ResponderEliminarEsto está que arde, no sé yo si Blas conseguirá disimular dos días más, porque si sigue así Mikaela o mejor dicho Helena se va a dar cuenta de sabe que es ella. De todas maneras, a veces lo que uno cree no es lo que piensan los demás y claro está, hasta que ahora no sepamos la versión de ella acerca de esos momentos gratos o ingratos, estaremos en áscuas totalmente. Yo me adelanto aun a riesgo de equivocarme, pero me da a mí que ella se dará cuenta.... pero solo es lo que me parece a mí, que después todo es distinto. Lo que pasa es que incluso Nico nota ese cambio en Blas, y poco a poco los demás también se darán cuenta a no ser que disimule, mucho y muy bien.
Besitos.
¡Hola FG!
Eliminarjajaja... Sí, Blas también está notando el calor de las llamas
Entiendo que pienses que Blas no va a poder disimular dos días más... ya veremos si lo consigue ;-)
Te explico lo de los recuerdos gratos e ingratos... Helena se ha reído después de oír los desatinos que ha dicho Blas... Blas le ha preguntado si le ha hecho gracia... Helena no ha querido admitirlo de modo alguno y es cuando ha dicho que estaba recordando algo... Blas le ha dicho que debía tratarse de un recuerdo grato... y ella, simplemente por no darle la razón, le ha contestado que era un recuerdo ingrato
La verdad es que disimular mucho y muy bien no es nada fácil... veremos qué tal lo hace Blas
Y sí, todos van a notar un cambio en Blas... ha encontrado a quien echaba de menos desde hace demasiado tiempo... Blas no volverá a ser el de antes
Es posible que Helena llegue a sospechar... pero ya veremos si lo tiene claro antes del viernes
Besitos
Pero ¡ascuas! Que capitulo tan emocionante.
ResponderEliminarMe parece que Nico prefiere a Mikaela Melero porque la sangre llama. Por lo otro, comprendo el nerviosismo, las ansias de Blas. No es para menos, está a punto de descubrirse la verdad. Me ha fascinado ese final: dos torres altas y poderosas que se observan sin opción a acercarse ni alejarse. Y que esas ansias y curiosidad es contagiosa, lo mismo me siento yo. =) ¡Tremendas canciones!
Un beso
(Disculpa la tardanza pero me quede con problemas de cable he internet y me atrasé con los comentarios.)
jajaja... Hola Yessy... Me río porque me ha hecho gracia tu exclamación ;-)
EliminarMe alegra que te haya parecido un capítulo emocionante
Creo que es muy cierto que la sangre llama... pero, de todos modos, "Mikaela" es la profesora más normal y razonable de este instituto
Sí, el nerviosismo y las ansias de Blas son comprensibles
A mí también me gusta mucho lo de las torres
jajaja... Eres muy simpática... No te preocupes, ese contagio no es malo ;-)
Esta canción me encantó en cuanto la escuché... la entendí muy bien... me alegra que te haya gustado
Y me alegra que se te haya solucionado el problema porque es un placer recibirte en mi blog
Un beso
Uff, entre MIkaela-Helena y Blas salta chispas, no creo que ya puedan aguantar más con esa pantomima, además de que está Nico y no atisbo a imaginar cual será su reacción, por que sí, es su profesora favorita pero como madre la cosa cambia y mucho, no me queda más remedio que esperar...
ResponderEliminarBesos
Hola Raquel... Pues sí, la verdad es que saltan chispas... y de muchos colores diferentes ;-)
EliminarBlas va a intentar aguantar hasta el viernes... su plan es descubrir a Helena en cuanto la visita se marche
Nos faltan ver dos reacciones... la de Nico, cuando se entere de que su profesora favorita es Helena, su madre... y la de Helena, cuando entienda y sea consciente de que Blas ya conoce su identidad
jajaja... Sí, creo que no hay más remedio que esperar... debemos darle tiempo a Helena para que se prepare un poco ;-)
Besos
¡Hola tesoro! Lamento la tardanza pero he estado corriendo haciéndome estudios médicos. Y tu novela es merecedora de sentarme y leer con tranquilidad y placer.
ResponderEliminar¡Qué buen capítulo! La tensión al borde en cada instante. Me ha encantado y he imaginado esa contestación a toda voz de Blas y casi rio como Helena. Tienes una imaginación increíble y nos haces volar hasta la escena misma. Felicitaciones querida amiga como siempre. Un beso grande y hasta noviembre.
¡Hola, Lou!
EliminarTranquila, no pasa absolutamente nada... Espero que estés bien... eso sí es importante
Me alegra que te haya gustado
jajaja... Es complicado no reírte si oyes algo así... y más si lo dice el chico que te vuelve un poquito loca... o muy loca ;-)
Muchas gracias por tus cariñosas palabras
Creo que nos veremos antes de noviembre... en tu blog, claro ;-)
Un beso grande
Uy por fin me puse a corriente. Dios por fin Blas se entero ya era cualquier rato Helena y él o se matan o se besan . Te mando un a brazo y me hace feliz volver a leerte.
ResponderEliminarHola JP... A mí también me hace feliz volver a verte por aquí... eres muy bienvenida... y espero y deseo que todo te vaya muy bien
EliminarSí, Blas ya se enteró de que Mikaela es Helena
jajaja... Si tienen que elegir entre matarse o besarse... esperemos que se comporten civilizadamente, y que se besen
Un abrazo fuerte
¡Qué ganas tengo de que Blas y Helena se enfrenten!, me come la impaciencia y vamos a ver como se lo toma el niño, esto se pone cada vez más interesante.
ResponderEliminarBesos
Hola, Julia... jajaja... Somos un poquito malvadas ;-)
EliminarPues puedes estar tranquila, verás ese enfrentamiento ;-)
Veremos como se lo toma Nico, será una gran sorpresa para él
Y me encanta que te coma la impaciencia ;-)
Besos
Ya saltan las chispas!! Menudo pulso entre Mikaela y Blas, al final del todo! como no se controle éste, desde luego que ella va a notar claramente que la ha reconocido...Los nervios están a flor de piel, no me extraña que Blas haya explotado cuando lo único que quiere saber (de momento) se alarga tanto...
ResponderEliminarUn beso
Hola Esther... Por fin puedo contestarte, de veras que esta gripe me está volviendo loca
EliminarSí, ya saltan las chispas... es lógico... Como bien dices, los nervios están a flor de piel... y Blas va a tener que contenerse mucho si no quiere ser descubierto
Un beso
No te preocupes por eso, ahora lo importante es que te recuperes, que la gripe da mucha lata...!
EliminarUn beso, bueno ya que estoy por tu casa virtual me leo otro capítulo :)
Gracias por tu comprensión... sí, desde luego, la gripe da lata... y ni te imaginas lo que extraño a mi madre en momentos como este... con ella ya estaría curada
EliminarUn beso